Los cruceros regresan a toda máquina
El anuncio de MSC de triplicar sus escalas en Cádiz da la medida de la velocidad de la recuperación
Durante toda una década, la anterior, de crecimiento exponencial e imparable, la Bahía de Cádiz pudo comprobar de forma satisfactoria que la llegada de grandes cruceros era un filón económico y un sector turístico por explotar. Se trataba, y pronto volverá a tratarse, de un ... sector que dejaba en la provincia varias decenas de millones de euros cada año, hasta superar el centenar durante la época de esplendor entre 2015 y 2019. La continua llegada de barcos, el reguero diario de sus pasajeros por el centro, abrió los ojos a muchos gaditanos sobre el potencial de Cádiz como destino turístico. Su despegue como destino provincial de moda en toda España coincidió con el protagonismo indiscutible de la capital en el sector de cruceros, de usuarios mayoritariamente extranjeros. Así, llegó a colocarse entre las cinco ciudades españolas (sin incluir las insulares) con mayor número de pasajeros por año, la segunda de toda Andalucía. Sólo gigantes turísticos como Barcelona, Valencia y Málaga le aguantaban el paso.
Cádiz llegó a triplicar en sólo diez años la entrada de cruceros en su puerto. Según los datos que maneja la Autoridad Portuaria de la Bahía de Cádiz, a partir de 2012, las escalas anuales nunca descendieron de las 300, una cifra impensable diez años antes, cuando el sector era tan sólo una promesa.
A estas alturas, dos años después de Wuhan, no hace falta decir cuándo se rompió todo, ni detallar el tamaño de la fractura. Fue total. Todo se detuvo. En el turismo y el transporte internacional, especialmente. Así que resulta mucho más productivo centrarse en la recuperación, en la resurrección de un sector clave para el turismo (y otros estamentos económicos) de la Bahía de Cádiz. Los números empiezan a crecer y pronto se parecerán a esos que no paraban de ascender en los años 16, 17, 18, 19...
Las palabras del director general de MSC Cruceros en España, Fernando Pacheco, lo confirmaron ayer en La Mirada Económica de LA VOZ. Sólo esta empresa prevé triplicar su número de escalas en Cádiz a lo largo de 2022, lo que ya le situaría por encima de sus cifras de 2019. Otras compañías tienen similares previsiones y los astilleros de la ciudad aguardan reparaciones tanto como los comercios clientes. La rueda empieza a girar de nuevo. Es fundamental para que la ciudad de Cádiz salga de su actual letargo, por mucho que le pese a los ‘turismófobos’ que la gobiernan.