¿Cómo recuperar la confianza?
La gravedad de las secuelas dependerá en buena medida de la capacidad ciudadana para reponerse a la ineptitud del Gobierno
Las secuelas que genera una pandemia como la que estamos sufriendo solo se superan si los ciudadanos recuperan la confianza. No es nada fácil porque la confianza que hemos perdido depende de cómo haya azotado la crisis a cada uno, aunque hay una percepción general ... de caos sin Gobierno fiable en la mayoría de los ciudadanos. No me refiero únicamente en España donde la gestión de la pandemia ha sido un completo desastre y estamos pagando las consecuencias de no tomar medidas a tiempo.
La falta de sensibilidad con las personas fallecidas y sus familiares perseguirá a los responsables del Gobierno que han pretendido rebajar la enorme trascendencia de la tragedia que puede alcanzar la cifra de 40.000 muertos y no han mostrado la humanidad y el dolor que siente la mayoría de los españoles en estos horribles momentos. Solo la ministra de Defensa y su emocionada intervención valorando el trabajo de las Fuerzas Armadas en el Palacio de Hielo de Madrid, convertido en gran morgue improvisada, se salva de la indiferencia tan aparente del resto de compañeros del Gobierno.
Y las lágrimas de la presidenta de la Comunidad de Madrid durante una misa en la catedral de la Almudena por las víctimas transmitían empatía con el inmenso dolor de miles de familias que es el dolor de todos los españoles. En muchos países del mundo la gestión no ha sido mucho mejor, empezando por el presidente de los Estados Unidos o del Brasil, que son los más destacados. No hay confianza, al revés, hay conflicto entre Estados Unidos, Francia y Reino Unido con China por el origen del virus.
El desafío actual está en generar confianza de los ciudadanos con sus instituciones, con los representantes políticos que las dirigen, con la sanidad que les atiende, y, lo más importante, entre nosotros mismos: entre vecinos, entre compañeros de trabajo, entre los que nos cruzamos en la calle, entre todas las personas allende los mares.
La recuperación depende de la confianza, que podamos viajar, que nos sintamos seguros allí donde vayamos, sea en España y en el extranjero. Nuestro modelo de vida, con el turismo como una de sus señas clave de identidad y como industria económica y de empleo, debe preservarse del miedo y el recelo hacia la persona que tenemos al lado. No va a ser fácil, es responsabilidad de cada uno y de los gobiernos de turno.