EL APUNTE
Anatomía de la ruina
La caída de la producción y el incremento del paro anuncian unos meses terribles en los que el apoyo a las empresas y la solidaridad serán claves
Cuando todos creíamos que los peores años de la recesión económica y la terrible crisis de consumo que estalló en 2008 y se extendió hasta 2014 habían quedado atrás, apareció un elemento microscópico capaz de paralizar todos los aviones del mundo, casi todos ... los trenes y camiones, muchos coches... A casi todos los seres humanos. Somos así de frágiles. Siempre lo fuimos pero es demasiado complejo vivir con esa certeza y preferimos aparcarla. De hecho, estamos esperando una vacuna para volver a guardarla en un cajón... Hasta el próximo ataque de miedo colectivo.
La brutal caída de la actividad económica en todos los sectores , derribados unos por otros como fichas de dominó, ya tiene cifras en este infausto 2020 que alargará su sombra durante toda la década que comienza. Andalucía sufrirá un retroceso económico medio que supera el 10%, una barbaridad en un índice que siempre se mueve en cifras de un dígito, en el que un decimal supone miles de millones de euros. El anuncio no lo hace cualquier agorero. Es fruto del estudio de Analistas Económicos de Andalucía, sociedad del grupo Unicaja Banco. En la provincia que nos ocupa, nos preocupa y nos duele, la previsión es aún peor. Prevé un descenso que oscila entre el 12 y el 14,5%. En el segundo supuesto, el más desfavorable, sería con mucho el más grave de toda la comunidad autónoma. Si a esto unimos el dato del paro conocido el miércoles, que deparaba para la provincia de Cádiz la mayor subida en España, sólo comparable con Madrid y Málaga, hay que decir muy poco.
Quedan meses durísimos de incremento del desempleo, cierres, contracción del gasto en empresas y familias, aumento de la morosidad... En estas circunstancias, el apoyo a la patronal, a las pymes y los autónomos es fundamental. Sobre sus espaldas doloridas descansa la única esperanza de recuperación. Mientras llega, que tardará y dejará mucha desdicha por el camino, habrá que recordar también que serán muchas personas, familias, las que necesiten de la solidaridad de la sociedad para poder subsistir y abastecerse de los productos básicos, para alimentarse. La tarea que tienen por delante administraciones, profesionales, empresariado y organizaciones solidarias es ingente. Se trata de resistir y sobreponerse a una situación de alarma social que ya es una realidad. Y dice ahora el presidente del Gobierno que la vacuna es cosa de seis meses. Hace dos, iba a estar lista en diciembre...