La adaptación como obligación

El cambio de actividad de algunas empresas, que han sabido amoldarse a nuevas demandas, es el camino a seguir por todos

En estos días de temores incrementados e incertidumbres nuevas, publicar una oferta de trabajo es un acto de valentía. Pero las hay. Son nuevas, o distintas. Desgraciadamente, aún falta mucho hasta que sean capaces de compensar los puestos que están en peligro, a las empresas ... que han visto su actividad reducirse, cuando no paralizarse. Pero es momento de reconocer a los que tienen la capacidad de transformarse para atender las nuevas demandas de limpieza o productos imprescindibles que hace unos meses eran excepcionales: desde mascarillas a mamparas , de nuevos productos químicos para la higiene a sistemas tecnológicos muy útiles. En cualquier caso, tiene mucho de simbólico presentar nuevas adaptaciones o reconversiones de empresas en los tiempos que corren. Simplemente, supone una declaración de intenciones. Viene a decir que los promotores de esta industria, de mayor o menor tamaño, entienden que hay demanda, personas necesitadas e interesadas en su producto, que hay actividad para dotar de sentido y contenido ese trabajo que empiezan a ofrecer. De esos ejemplos, aún privados y puede que aislados, podrían tomar ejemplo grandes contenedores de empresa e industria, desde la Universidad de Cádiz hasta la Autoridad Portuaria o las grandes empresas de sectores como el aeronáutico y el naval, pasando por la Zona Franca de Cádiz. Todos ellos son algunos de los pocos motores fiables que le quedan a la economía a la empresa de toda la Bahía de Cádiz y el hecho de que sean capaces de amoldarse a una situación tan compleja supondría un golpe en la mesa, un ejercicio de confianza en el presente y en el futuro que ahora casi todos vemos en colores oscuros.

Pero, además, esa muestra de fe en la recuperación económica necesita continuidad. Estos pequeños pasos de adaptación de empresas, que se ha visto también en las bodegas de la provincia, por ejemplo, son los primeros de muchos puesto que deberían marcar la salida para los cacareados nuevos modelos productivos que tanto mencionan los dirigentes políticos y que nunca llegan a verse. Haya o no síntomas de mejoría en lo financiero, en lo económico, es necesario adaptarse, cambiar, para mantener el rumbo firme y los remos activos cuando cese la tormenta.

Artículo solo para registrados

Lee gratis el contenido completo

Regístrate

Ver comentarios