Ahora, el Corpus

Dejando aparte el atípico COAC ya ampliamente comentado, las celebraciones oficiales de esta simpar semana primaveral, han dejado mucho que desear

Antonio Fernánez-Repeto

Rara, rara, qué quieren que les diga. Estamos pasando una semana de las más raras que recuerdo. El pasado domingo lo cerramos con un levantazo de muerte y bajo la amenaza (y bien que se está cumpliendo) de la llegada de una ola de calor ... impropia para estas fechas. También esa noche dominical se acababan las celebraciones de un carnaval (con minúsculas) que nos había acompañado toda la semana. Ni que decir tiene que cualquier parecido con nuestro Carnaval ese sí, con mayúsculas de febrero, habría sido pura coincidencia. Dejando aparte el atípico COAC ya ampliamente comentado, las celebraciones oficiales de esta simpar semana primaveral, han dejado mucho que desear. Se anunciaban carruseles de coros por sus emplazamientos habituales tanto por el instaurado estos años en la Plaza de Mina, como el tradicional alrededor del Mercado. La hora de comienzo, acorde con las altas temperaturas, era a la puesta de sol (solución coherente a todas luces) pero ocurrió que a esas horas el público asistente era tan escaso que incluso muchos componentes se bajaban de sus bateas por que no tenían a quien cantar. Yo disfruté la actuación de Los Babetas en la esquina de Valverde y éramos no más de treinta personas.

Artículo solo para registrados

Lee gratis el contenido completo

Regístrate
Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación