Pedro Sánchez, el felón mayor del reino
El indulto hacia los condenados por el intento independentista en Cataluña es una mancha en nuestra reciente democracia solamente comparable con un golpe de Estado
El día de ayer quedará marcado en la historia democrática de España como uno una de las mayores felonías realizadas por un partido político. El indulto promovido por Pedro Sánchez y su gobierno socialcomunista hacia los condenados por el intento independentista en Cataluña es una ... mancha en nuestra reciente democracia solamente comparable con un golpe de Estado. Un intento del PSOE de pasarse la separación de poderes, el Estado democrático en el que vivimos y la propia Constitución española por el forro de sus caprichos.
Pedro Sánchez con este indulto pasa a formar parte del de la lista de los mayores traidores a la nación. Y todo ello por el simple hecho de mantener sus infames posaderas sentadas en la poltrona de Moncloa durante el tiempo que dure este aperitivo para saciar el voraz apetito independentista de quienes lo mantienen al frente del Estado del que abjuran. El presidente socialista pasará a la historia de nuestro país como el mayor felón, traidor e infame político que se ha conocido en la etapa democrática que estamos viviendo. Es irrisorio por parte del Gobierno que se apele al perdón, a la concordia entre españoles, a decirnos que esto se hace por el bien de todos cuando desde ese mismo ejecutivo se ha utilizado, y se sigue utilizando, día tras día la Guerra civil española para mantener abierta la herida entre españoles. Es muy curioso como el PSOE pretende que olvidemos lo que ocurrió hace unos años en una parte del Estado español pero mantiene vivo el odio entre bandos de hace más de ochenta años. Es un ejercicio de irresponsabilidad política que se pretenda perdonar a quien ha cometido un delito de sedición, entre otros, y, sin embargo, se esté constantemente enjuiciando y condenando a quienes participaron en la Guerra civil española. No es lógico, salvo porque así no echan a pelear, que se pretenda reabrir constantemente la brecha que se quedó cerrada por nuestros mayores, que fueron los que lo vivieron en su piel, en el momento de la transición y, por otro lado, se quiera tapar lo que es un ataque frontal y directo a la soberanía de España.
Con este panorama es normal que desde el Partido Popular ni se pase por la cabeza sentarse con el “felón” de Sánchez a discutir si quiera la renovación del Consejo General del Poder Judicial. Miedo me da solo de pensar lo que desde el PSOE se metería en ese Consejo para poder manejarlo a su antojo y que se hagan los dictámenes a su beneficio, sin ajustarse a la legalidad, como ya se barrunta que ocurre en el seno del Ministerio Fiscal.
Si alguien pensaba que no podríamos tener un presidente peor que Zapatero, se equivocó. Este que tenemos ahora no solo es malo como político, es un aprovechado que solo ha luchado para ser Presidente para su propio beneficio. Solo se ha movido para mantenerse en el puesto cueste lo que cueste, se tenga que vender a quien se tenga que vender. Y lo peor de todo es que lo hace con el beneplácito o, quizás, con el miedo de quienes integran el Partido Socialista Obrero Español.
Lo dicho, tenemos dirigiéndonos al mayor felón que recientemente hemos conocido y que nos trata a los españoles como si fuéramos tontos. Suerte que, tarde o temprano, la historia pone a cada uno en su lugar y preveo que el de Sánchez no será el que él imagina ahora desde su poltrona de Presidente omnipotente.
