apunte
Un éxodo histórico de talento gaditano
Desde hace décadas miles de jóvenes gaditanos se marchan de su tierra en busca de un futuro laboral que aquí se les niega
Sin duda es uno de los grandes males de la provincia de Cádiz. Desde hace décadas, miles de gaditanos se marchan cada año lejos de su tierra en busca de oportunidades laborales que les permitan realizarse tanto profesional como personalmente. Con ellos se marcha el ... talento y las esperanzas de que algún día las próximas generaciones puedan revertir esa situación. Para ello hace falta un enorme cambio de mentalidad por parte delos responsables políticos tanto nacionales como autonómicos y municipales. Obviamente no es un mal únicamente de la provincia Cádiz, está extendido prácticamente a toda Andalucía, aunque al sur del sur es aún mucho peor. Andalucía no es una tierra de oportunidades para su propia gente después de 40 años de gobiernos socialistas en los que se ha perpetuado la imagen de una sociedad subvencionada, paniaguada, sólo pendiente de conseguir una subvención, la que sea. Es cierto que el nuevo Gobierno liderado por Juanma Moreno se ha marcado como uno de sus grandes objetivos el revertir esa situación. Y empieza a calar mensaje de que Andalucía ya supera a Madrid o Barcelona en crecimiento económico o en creación de empresas. Pero aún queda un mundo para lograr retener ese talento gaditano. Cierto es también que un largo camino siempre se empieza con un primer paso, por pequeño que sea. Esta semana la delegada de la Junta en Cádiz, Mercedes Colombo, ha anunciado la puesta en marcha de un programa denominado 'Joven Ahora', por el que se contratará a 644 jóvenes gaditanos en situación de desempleo.
Obviamente no es más que una gota en el océano, pero es un paso. O al menos una declaración de intenciones. Planes similares tiene también la Diputación y la mayor parte de los municipios de la provincia. Ese es el camino a seguir. Hechos y no palabrería. Para que los protagonistas del reportaje que hoy publicamos en estas páginas, o al menos sus hijos en un futuro, no tengan que contar las bondades laborales de lugares como Edimburgo o Innsbruck y sí las de Cádiz, Jerez, Paterna o San Fernando.