El apunte
Demasiado serio para jugar a las sospechas
La denuncia del PSOE sobre las supuestas irregularidades en los contratos de la Junta son demasiado graves como para que no lleguen a los juzgados
La clase política de esta región tiene la máxima capacidad para sorprendernos cuando pensamos que ya había alcanzado su cenit de agudeza. El analista político, el periodista o cualquier ciudadano de a pie no puede sino maravillarse de las distintas estrategias que siguen los partidos ... cuando comienzan a acercarse el calorcillo de las elecciones, sean éstas del tipo que sea. Y cuantos más visos de estrellarse tenga una formación, mayor será el incendio que despliegue en derredor suyo para tratar de evita el desastre.
Hoy nos encontramos con el caso del Partido Socialista y sus denuncias a la Junta de Andalucía sobre la supuesta adjudicación de contratos a dedo en la sanidad gaditana. Unos contratos que habrían sumado la friolera de 46 millones de euros y que, siempre según la versión que defendió ayer el siempre vehemente Juan Carlos Ruiz Boix, se habrían adjudicado sin respeto por los procedimientos legales. Recordemos que quien esto dice no es un julián cualquiera, sino el secretario provincial de los socialistas gaditanos y presidente de una institución como la Diputación de Cádiz, amén de alcalde de San Roque. Alguien que debería saber algo de lealtad institucional y respeto en política. Y respeto, sobre todo, a los jefes de todo este sistema democrático: los ciudadanos, sean votantes del partido que sean. Porque si las acusaciones de Ruiz Boix son ciertas, ¿por qué las realiza en el marco de unas declaraciones a los medios de comunicación? Si tal como asegura todo este entramado ponzoñoso lo ha destapado el líder del PSOE de Andalucía, Juan Espadas, ¿por qué no han ido a los juzgados a denunciar la prevaricación que sugieren con sus palabras? ¿Será quizá que están más preocupados por lograr un titular en los medios de comunicación que por el cuidado de la sanidad pública andaluza?
Llama la atención, una vez más, el uso interesado que está haciendo el Partido Socialista de la sanidad pública en los últimos meses. El mismo PSOE que aumentó la concertación al máximo en una provincia como Cádiz se arroga el derecho ahora de acusar de privatizar cuando está en la oposición. ¿Cuántas más cosas nos quedarán por leer en estas semanas?
