OPINIÓN

Un oso perezoso

Llegué a 'The Bear' por una de las pocas personas cuyo criterio ya me hace confiar en que no me va a recomendar algo simplemente porque él lo ha visto, sino porque, de verdad, ha visto algo que merece realmente que yo le dé una oportunidad

Juan Gómez-Jurado

Entre la maraña de series que, como fentanilo cultural, nos vierten cada semana las plataformas, una me ha llevado a escribir esto, precisamente porque no parece una de ellas. Llegué a 'The Bear' por una de las pocas personas cuyo criterio ya me hace confiar ... en que no me va a recomendar algo simplemente porque él lo ha visto, sino porque, de verdad, ha visto algo que merece realmente que yo le dé una oportunidad. Si no ha visto usted la serie no se preocupe que no voy a desvelar nada de una trama que, de verdad, es lo de menos. Y es precisamente eso lo que la hace diferente de esas que entran en el saco de personajes interaccionando, sorpresas cada 10 minutos para tratar de que el espectador no encienda el móvil y pretendida profundidad a la hora de tratar temas difíciles que, al final, quedan diluidos en bicarbonato visual. Cuando uno ve estas otras series prefabricadas puede perfectamente oler el aroma a reescritura, a consejo de administración pidiendo cambios, a estrella tremendamente bien pagada pidiendo que el personaje se adapte a sus cualidades como actor, a sala de reuniones con cristalera grande y pizarra Velleda.

Artículo solo para registrados

Lee gratis el contenido completo

Regístrate
Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación