OPINIÓN
La lista de Cádiz
En el caso de la capital, ya muy visitada, reiteramos cuestiones que siguen pendientes de arreglo y que suponen para la agradable vida ciudadana y el disfrute turístico, evidentes carencias
No siempre a base de insistir, se consigue lo que se quiere. A veces los más tozudos convertimos las peticiones en molestos requerimientos que no facilitan su solución. Repetir la misma cantinela supone presionar al que debe resolverlas con una especie de molestia, que pone ... a la defensiva contaminando el entendimiento. También, las cosas no se ven igual desde la fácil crítica y el que tiene la responsabilidad de contestar las cuestiones urbanas o patrimoniales.
Muchas instituciones civiles de Cádiz o de cualquier localidad, entre sus objetivos tiene la denuncia de las malas condiciones urbanas, especialmente su mejor estima higiénica, estética y monumental. Estas instituciones son una saludable vacuna para que no se olviden los motivos pendientes de la sociedad, recordando e insistiendo en su mejor solución. Ateneo, Cádiz Ilustrada, Fundación Ory. Espacio Quiñones, APC, ADIP CÁDIZ, etc., somos muchos interesados, altruistamente, en la mejora.
En el caso de la capital, ya muy visitada, reiteramos cuestiones que siguen pendientes de arreglo y que suponen para la agradable vida ciudadana y el disfrute turístico, evidentes carencias. Hay una larga cola de temas, no tan costosos y ciertamente inservibles como Entrecatedrales, Pérgola, Queco…etc. que prometidos por los que nos representan y priorizan en los impuestos, nunca vemos hechos realidad. Siempre se dice que se están estudiando, incorporando en los presupuestos y que es cuestión de poco tiempo. También los propietarios privados andan escasos de intención y dinero.
Intentaremos enumerar una mínima lista, y créanme, no espero que esta se convierta en la de Schindler para salvar a muchos sujetos. Sea simplemente un recordatorio con el mayor de los respetos, intentando que no se olviden ausentes de respeto e interés. La Catedral Nueva sin remate adecuado y respetuoso, en el mejor edificio religioso de esta ciudad, no olvidemos privado, que este año acaba de acoger un Corpus excelente. Una necia trifulca de competencias la dejó mocha sin linterna o cruz. Las murallas, van poco a poco, pero demandamos un plan estratégico del Estado, Junta y Ayuntamiento, como estatuto fiscal, para que se nos devuelvan los caudales del mantenimiento de las fortificaciones. Algunas esquinas y castillos se arreglan, pero la geométrica perimetral gaditana exige más decoro. El Museo de Cádiz, con una interminable y mínima obra en la montera y más de 30 años esperando la tercera fase de la ampliación. Es obligado devolver las dependencias de la Real Academia de Bellas Artes a su estado inicial, por un rígido e impresentable desahucio, donde peligra gravemente su valioso Patrimonio.
Nobles iglesias como San Juan de Dios, sin coronación y con la portada a punto de dar un susto; Santa María con su velo intemporal; el olvido de la Pastora; las conventuales con desgarros y grietas por todas partes; edificios como las torres miradores, identidades de esta ciudad, que se sonrojan al verse; el Casino fantasma; Entrecatedrales ocultando sus magníficos restos arqueológicos; el cruento deterioro de la piedra ostionera despellejada, que está cambiando el color de la ciudad; remates y copas perdidas en las peinetas de nuestras nobles fachadas; etc. etc.
No solo faltan ayudas y responsabilidades públicas y privadas, es necesario creernos nuestra ciudad y pagarla sea con tasa o con platillo. El nulo entendimiento entre administraciones desde hace años, es el mayor factor de deterioro de nuestro Patrimonio. No extrañe que se convierta en el papel de la canalla con las pintadas, o en robo de indigentes. Salud.