OPINIÓN
Porno duro y menos duro
Llevamos meses dándole vuelta a la amnistía, ahora la llaman para despistar reencuentro (me voy a poner a llorar)
Obsceno, indecente, impúdico… Son los primeros calificativos que encuentro para definir el concepto. El más duro es explícito, a diferencia del que lo es menos, que no lo es. Realmente estamos ante conceptos diferentes y no ante posibles gradaciones de un mismo concepto. «Snchz» ha ... pretendido desviar la atención entrando de lleno en el porno y sus limitaciones para los menores. «Snchz» la tienen dura, muy dura, la cara por supuesto. Cuando hablamos de pornografía es una exigencia al varón tenerla también muy dura, además de la cara. Otro que la tiene realmente dura es Bolaño. No se como tiene cara para defender cosas indefendibles. El terrorismo es definido por la RAE como provocación o mantenimiento en estado de terror a la población, mediante actos que pongan en peligro la vida, la integridad física o la libertad de las personas o la conservación de los bienes. En Cataluña obviamente ha habido actos terroristas a colocación con el golpe de Estado de 2017. El artículo 573 CP define el tipo delictivo como la comisión de delitos graves con la finalidad de subvertir el orden constitucional, o suprimir o desestabilizar gravemente el funcionamiento de las instituciones políticas o de las estructuras económicas o sociales del Estado, u obligar a los poderes públicos a realizar un acto o a abstenerse de hacerlo, alterar gravemente la paz pública, desestabilizar gravemente el funcionamiento de una organización internacional, o provocar un estado de terror en la población o en una parte de ella. A continuación, el artículo 573 bis CP establece la pena que corresponde a cada delito de terrorismo, partiendo de que si se causa la muerte de una persona se aplicará la pena de prisión por el tiempo máximo previsto en el Código Penal. De donde se infiere que el tipo es único, las penas diferentes en función de los resultados. El Ministro de Justicia ha intentado diferenciar dos conceptos de terrorismo, el malo y el menos malo, el duro y el menos duro. Cuando es sólo uno, con efectos diferentes por el resultado de la conducta. Llevamos meses dándole vuelta a la amnistía, ahora la llaman para despistar reencuentro (me voy a poner a llorar). También la portavoz del gobierno, bueno, en realidad todo el gobierno, constato que la tienen muy dura y muy larga, la cara y la lengua. Y todo para justificar lo injustificable. Dice una máxima jurídica que «a lo imposible no se está obligado». Seguro que Bolaños la conoce. Pues hombre, no hagas el ridículo, que estás dejando al Cuerpo de Letrados del Banco de España por los suelos.
El llamado «procés», la amnistía, el terrorismo independentista (investigados), la trama rusa, el 3%, Banca Catalana, El Barcelona y los árbitros…son todos términos que son calificados de obscenos, indecentes, impúdicos…y muchas más cosas. Tantas que justifican para algunos la nítida adscripción de los españoles en dos grupos detrás de un muro. «Snchz» dividió España imponiendo el apartheid a la española. El muro, esa barrera infranqueable que segrega la población creando espacios separados, aísla una parte de la población confinándola en un gueto. El de Varsovia fue implantado en el centro de la capital polaca en 1940, cuando comenzó la construcción del muro y existió hasta su destrucción total en 1943, un mes después de iniciado el levantamiento judío. Los muros nunca son buenos. Por eso tenemos el deber de levantarnos y derribarlos. Por supuesto que el de Berlín tampoco lo fue. Lo llamaban el de la vergüenza, así es que júzguenlo y no encontrarán nada bueno en todo lo que aconteció al este del mismo. La izquierda desvergonzada se retrata en el de la vergüenza. Lo añoran porque supuso el desmantelamiento de la URSS y la zozobra del comunismo. Ahora, aquí, el gobierno y sus socios han decidido la construcción de uno. A un lado los que no comulgan con el gobierno y sus socios. El nacional socialismo del siglo XXI nos ha condenado a los que no pensamos como ellos. Esta semana he tenido la ocasión de constatar el por qué la mitad de los españoles hemos sido condenado al ostracismo. Obviando su concepción griega, hoy se ajusta a la intención de «Snchz», significando apartamiento de cualquier responsabilidad o función política o social; aislamiento, apartamiento, exclusión, marginación, alejamiento, incomunicación y confinamiento. En eso consiste el muro. Sí, ese construido «exprofeso» por el nacional socialismo.
Decía el delincuente Junqueras, el del ADN francés y su parecido con Alain Delón, que «todos los españoles de bien deberían aprobar este tipo de ley (amnistía), porque «todos los demócratas merecen ir a votar y a no ser golpeados por la policía al ir a votar». Lo que de forma indubitada nos sitúa a los que para él no somos «de bien», detrás del muro. El nacional socialismo, representado en la cúspide por «Snchz», ha popularizado en España el término «fachosfera», que fue acuñado por vez primera en 2019 por la Asamblea Nacional francesa, en un informe sobre la lucha contra los grupúsculos de extrema derecha. Para el ínclito de la Moncloa todo lo que está a la derecha del muro es extrema derecha. «Snchz» quiere ganar la batalla del lenguaje. Señala todo aquello que no se corresponde con el ideario nacional socialista, apelando al voto del miedo al fascismo. En eso consiste el término facha. Lo que significa que lo que están a la izquierda del muro podría ser llamado sin temor a equívocos «Snhsfr» (Sanchesfera). Ajustemos los términos, aunque sólo sea por justicia sintáctico-gramatical. Miren, como nunca es tarde si la dicha es buena, espero que los que no somos de izquierdas, algún día, más pronto que tarde, restablezquemos el equilibrio semántico que hoy no existe (el buenismo de lo progre, frente a lo malo y facha de todo aquel que no comulga con el social-comunismo patrio). Nunca escucharan a uno de izquierda decir que son de centro izquierda. Los que no somos de izquierda debemos de perder ese complejo, absurdo donde los haya, porque es renegar al final de los principios y valores en los que creemos y a los que optamos por posicionarnos libre y voluntariamente a la derecha del punto de intersección del eje de abscisa, cuando nos posicionamos políticamente. Es decir, al otro lado del muro. La superioridad moral de la izquierda es la consecuencia de la separación entre los dos espectros o puntos cardinales de la política. La izquierda ganó la batalla de la transmisión del mensaje hasta hoy, pero en absoluto ha ganado la guerra. «Snchz» nos califica de fachas con toda la carga peyorativa que lleva incorporada. Por eso le digo que, todos esos que quedan al otro lado del muro, no pueden ser otros que los «comunistas de mierda»(cien millones de asesinados en nombre de la causa comunista). En este caso el calificativo se lo pongo yo, para incorporar al concepto toda la carga peyorativa que se merece y que el lenguaje construido por la izquierda ha preservado como un logro político al que deben aspirar las sociedades. Es el lugar común de aquellos incorporados a la «Sanchesfera», o sea, el lugar del muro donde se encuentra «Snchz». Este muro era denominado Muro de Protección Antifascista por la RDA. El Bloque del Este dominado por los soviéticos sostenía que el muro fue levantado para proteger a su población de elementos fascistas. Hace meses un socialista que lleva toda la vida viviendo de la política y no ha terminado primero de carrera decía que, lo levantaría para separar al fascismo y a los fachas, del gobierno de progreso, en el que incluyen a Junts (con investigados por terrorismo y por llevárselo crudo) y a las Putas Nueces Vascas (PNV), amén de socialistas del siglo XXI, comunismo, ERC y el valiente ahora fugado a Suiza, terroristas condenados y Bildu. Esta es la otra parte del muro, el «sanchesferado» Creo que me he quedado corto en el adjetivo que los califica como grupo. Esta parte es omnicomprensiva de los «españoles de bien», a juicio de Junqueras. Nosotros (ustedes y yo) tenemos que ser necesariamente para este delincuente por golpismo, «españoles de mal» …aquellos conforman el gobierno y sus apoyos. Hay que tenerla muy dura y muy larga «Snchz» …bueno, a lo mejor no es así aunque lo añore con todas sus fuerzas.