Tribuna Libre

La fuga de Cádiz

De esta manera es como Juan cruzó España, hasta Irún, llevando delante a guardias civiles que iban relevándose a medida que se adentraban en las diferentes demarcaciones de la Benemérita

Ernesto Pérez Vera

Cádiz

Después de dos años de angustiosas idas y venidas desde La Línea hasta Cádiz, Juan, un linense paisano mío, estaba ya hasta el gorro de que los médicos no dieran con la causa que a su hija de 6 años le provocaba peligrosísimas infecciones internas ... de origen urológico. El pequeño organismo de Fany llevaba encima, a tan corta edad, decenas de pruebas diagnósticas de esas que, practicadas en exceso, pueden desembocar en perniciosos efectos secundarios por mor de la mucha exposición radiológica. Así pues, Juan, allá por febrero de 1986, se plantó en el despacho gaditano del galeno que dirigía los infructuosos estudios que a su niña le estaban realizando desde 1984. Al doctor le dijo, cuando lo tuvo ante sí, que había encontrado una suerte de mecenas en París que se había hecho cargo, en cuanto a lo económico, del ingreso de Fany en un hospital parisino. Esta persona, ahora y por aquel entonces amiga de Juan, antaño había sido su patrón. Efectivamente, el protagonista de esta historia, ya jubilado, fue un joven emigrante español en la Galia.

Artículo solo para registrados

Lee gratis el contenido completo

Regístrate
Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación