EL APUNTE
El PSOE de Cádiz sigue el dictado
Los socialistas gaditanos brindan, de momento, sin fisuras su apoyo a Sánchez
Los socialistas gaditanos han cerrado filas entorno al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y avalan la gestión que ha desarrollado al frente del Ejecutivo en estos últimos seis años. Desde su secretario provincial. Juan Carlos Ruiz Boix, hasta la subdelegada del Gobierno en Cádiz, Blanca ... Flores, han hecho un llamamiento a la militancia en favor de Sánchez ante lo que consideran un acoso y derribo orquestado la derecha política y mediática. El presidente aparcó su agenda oficial este miércoles y se ha tomado hasta el lunes para meditar su continuidad o no al frente del Gobierno de la Nación tras abrir causa un juzgado de Madrid por supuesto trafico de influencia de su mujer, Begoña Gómez. El PSOE gaditano ha actuado en esta ocasión como lo hace cada vez que hay una crisis que se encuentra fuera de sus fronteras, es decir, acata la orden general de Madrid para seguir saliendo en la foto. De momento, ningún socialista se ha mostrado contrario a dar su apoyo a Sánchez pese a que Cádiz fue de las últimas provincias en reconocer el liderazgo de Pedro Sánchez cuando ganó las primarias y apuntó hacia la Moncloa. Esta situación le costó el cargo a la entonces secretaria provincial del PSOE, Irene García, que retrasó más de la cuenta el apoyo por lealtad a la secretaria de los socialistas andaluces, Susana Díaz, que había librado una dura batalla con Sánchez por hacerse con las riendas del PSOE. Por su parte, el PP de Cádiz ha salido en tromba a criticar la irresponsabilidad del presidente. Ignacio Romaní, uno de los cuatro diputados que tiene el PP en el Congreso por la provincia de Cádiz, ha criticado la decisión de Pedro Sánchez de paralizar su agenda y cree que este movimiento responde a una cuestión más táctica que personal. Asegura que «debe dar explicaciones a los españoles y sin embargo lo que ha hecho es irse a su casa». Expone el coordinador provincial del PP que le resulta complicado dar credibilidad a lo que cuenta el presidente en la carta «porque ha mentido tantas veces que por mucho que uno quiera, creerse a Pedro Sánchez es muy complicado». La meditación de Sánchez puede quedar en nada. Una de las opciones más probables que desde la tarde del pasado miércoles revuela en las mentes de muchos analistas políticos es la convocatoria de una moción de confianza. A diferencia de la moción de censura, la moción de confianza se utiliza, en términos técnicos, para determinar si el Gobierno en el poder cuenta con el respaldo del Congreso de los Diputados.
