APUNTE
Pequeños negocios
Los datos de la Seguridad Social dejan claro que la mayoría de las empresas apenas cuentan con uno o dos empleados
Uno de los grandes –y falsos– mantras que repite la izquierda radical es el de la demonización de los empresarios. Pase lo que pase, hagan lo que hagan, son vilipendiados por el mero hecho de serlo. Construir este 'relato' es fundamental para poder vender sus ... ideas trasnochadas anti capitalistas, comunistas y así poder erigirse en 'salvadores' de las clases más desfavorecidas. Dentro de esa manipulación que tratan de ejercer está la de crear el falso mito de que todas las empresas son grandes corporaciones con miles de empleados a los que se explota sin misericordia.
Sin embargo, nada más lejos de la realidad. La inmensa mayoría de las empresas que operan en España, y por supuesto en la provincia de Cádiz, son pequeños negocios en los que apenas hay un empleado, dos a lo sumo, además del empresario autónomo. Bares, cafeterías, mercerías, talleres, librerías, carnicerías, pescaderías, tiendas de zapatos... componen ese sector empresarial al que tanto odian. Afortunadamente, cada día son más, como reflejaba el informe hecho público ayer por el Instituto de Estadística y Cartografía de Andalucía, que arrojaba el dato de que la provincia de Cádiz cerró el mes de junio con más de 33.400 empresas en la Seguridad Social, cerca de 400 más que en mayo. Una cifra sin duda importante que debe seguir creciendo para fortalecer el tejido empresarial gaditano. Según esos mismos datos, un total de 26.224 pertenecen al sector servicios, siendo 8.142 de comercio al por mayor y al por menor y a reparación de vehículos de motor y motocicletas, 5.902 de hostelería, 1.913 de actividades profesionales, científicas y técnicas, 1.683 de transporte y almacenamiento o 1.375 de actividades sanitarias y de servicios sociales.
Cuando la ministra Yolanda Díaz, como máxima responsable política en materia de empleo en España, trata de imponer sin ningún tipo de consenso la reducción de jornada, es perfectamnente consciente de que a quien perjudica es a esos pequeños empresarios, amén por supuesto de sus empleados. No tanto a las grandes corporaciones de cientos de empleados, que también las hay. Pero son minoría. En este país, y en esta provincia, la inmensa mayoría de empresas son pymes. En algunos sectores se podrán implantar este tipo de medidas. En otros sin duda es condenarlos al cierre. Sea como fuere, este tipo de cuestiones merecen mucha más negociación y consenso. Algo de lo que el comunismo, a lo largo de la historia, siempre ha adolecido.