EL APUNTE
Una obra naval de calado
Royal traerá a Cádiz al crucero 'Allure' para rematar la obra que quedó pendiente en 2020
La naviera Royal Caribbean ha delegado en Navantia Cádiz la renovación y mejora de algunos espacios del megacrucero 'Allure of the Seas', el segundo más grande del mundo después del 'Icon of the Seas', también de Royal. El barco llegará a la planta gaditana el ... próximo mes de febrero para abordar la segunda parte de la reforma que quedó pendiente en 2020 como consecuencia de la irrupción del covid. La remodelación incluye la incorporación de nuevas suites panorámicas sobre el barco puente, una terraza de piscina de nuevo diseño, toboganes de carreras, un bar tiki caribeño, un bar deportivo y un restaurante de estilo sureño, una escape room y una zona de laser tag, entre otras actualizaciones. En total casi 100 millones de euros para adaptar el barco a las nuevas necesidades y demandas de los clientes. El 'Allure of the Seas', tiene capacidad para 6.318 pasajeros (5.400 en ocupación doble) y 2.384 tripulantes aproximadamente. Cuenta con 18 cubiertas de las cuales 15 son para pasajeros y 2.700 camarotes. La obra que se le practicará a este crucero es clave para Navantia, ya que Royal Caribbean es cliente preferente y tiene delegada en los astilleros públicos españoles la varada y mejora de toda la flota que opera por la zona del Mediterráneo. El 'Allure' tenía prevista su entrada en la Bahía a mediados de marzo de 2020 para una reforma integral, pero el decreto de alarma por el coronavirus obligó a cambiar de planes y a trasladarlo a otro puerto. Tras la reapertura de los astilleros, el barco intentó de nuevo su entrada en Cádiz a mediados de mayo, pero inicialmente lo prohibió el departamento de Sanidad Exterior, debido a exceso de tripulación. Posteriormente se levanto la prohibición al confirmarse una reducción del número de tripulantes. El barco entró en junio en la planta gaditana, pero solo se actuó de manera parcial. Ahora se remata aquella obra. Cabe recordar que el 'Allure' venía al astillero de Cádiz para someterse a una profunda reforma cuya inversión ascendía a 180 millones de euros . De hecho, su llegada a la Bahía incluía también la presencia de dos ferrys-hoteles para poder alojar a la mano de obra extranjera, unas 2.000 personas, que iban a participar en este proyecto naval. El planning de obra integral del 'Allure' recogía la incorporación de 50 nuevos camarotes de lujo en la zona del puente, la transformación de los espacios comunes y la colocación en las cubiertas del barco de nuevas instalaciones acuáticas, como toboganes, además de nuevos restaurantes y la renovación de los clubs infantiles.