Apunte
Emasa paga el destrozo de los servicios y empresas municipales
PSOE y PP coinciden en que las rechazadas cuentas de la empresa son un desastre. Uno más en la gestión del equipo de Gobierno
PSOE y PP coinciden en que las rechazadas cuentas de la empresa son un desastre. Uno más en la gestión del equipo de Gobierno
La llegada de la versión gaditana de Podemos al Gobierno municipal de Cádiz tuvo una gran ventaja: las sorpresas estaban garantizadas. ... Ocho años después, queda claro que tenía un gran inconveniente: el estado de la ciudad que van a legar a los siguientes gobernantes puede resultar desastroso.
La normalidad y el aburrimiento han sido conceptos descartados, desterrados en la administración local y, por tanto, en las empresas municipales. A cambio, algunas de ellas, esenciales, como la suministradora eléctrica o la de aparcamientos (Emasa) están en una situación crítica cuando los actuales responsables, del equipo de Gobierno, las recibieron más que saneadas. Las denuncias de PP y PSOE, poco sospechosos de ponerse de acuerdo sobre ningún aspecto en Cádiz, aseguran que Emasa está al borde de la ruina, con unos gastos en personal que superan el 80%, sin diálogo con los trabajadores, con inversiones repetidas y suspendidas o futuras vías de ingresos (aparcamientos subterráneos descartados).
Apretar en el afán recaudatorio con el aparcamiento regulado y las sanciones son las únicas salidas. Es el resultado de una gestión nefasta, en la que el presidente y concejal Martín Vila «cree que la empresa es suya», según la edil socialista Natalia Álvarez. En China se dice como maldición «que tengas años interesantes». El Ayuntamiento de Cádiz, la ciudad, ha tenido ocho años «interesantes» para algún observador neutral, lejano, pero muy dañinos para sus vecinos. Son ellos, los que habitan en la ciudad, los que van a pagar tanta anomalía en forma de servicios muy deficientes. Basta repasar el estado actual, y reciente, de Policía Local, empresa de transportes, limpieza y, también, Empresa Municipal de Aparcamiento.