EL APUNTE
Un canon turístico consensuado
La implantación de una tasa turística debe ir de la mano de acuerdos con el sector
La implantación de una tasa turística en la ciudad ha sido objeto de debate en los últimos tiempos en la sociedad gaditana. Desde el anterior equipo de Gobierno se insistió en la necesidad de aplicarla cuanto antes, argumentando que cada vez hay más apartamentos turísticos ... en lugar de viviendas para los vecinos. La medida puede ser beneficiosa para la ciudad, aunque debe tomarse con cautela y de manera consensuada con el sector turístico, sin caer en propuestas frívolas que acaben enfrentando los intereses de un motor económico como es el turismo y los propios ciudadanos.
El Ayuntamiento de Cádiz aprobó ayer la propuesta presentada por Adelante Izquierda Gaditana (AIG) para la implantación de la tasa turística, contando con la abstención del equipo de Gobierno, que se mostró más partidario de apoyar una propuesta del PSOE para equiparar las tasas de las viviendas turísticas al resto de alojamientos que generan actividad económica.
No cabe duda de que la tasa turística puede ser una excelente fuente de financiación pública, pues recae sobre el visitante, no sobre el vecino. Sin embargo, no se debe apostar por una medida radical que ahuyente al turista, con el simple argumento de que hay que defender los intereses de los gaditanos ante la invasión de los visitantes.
El modelo que se aplica en los destinos que la tienen implantada en otras ciudades es que hoteles, pensiones y apartamientos turísticos se encarguen de cobrar la tasa y luego la abonen al Ayuntamiento o la comunidad autónoma, según quién haya establecido la norma.
Precisamente, ahí es dónde pone el matiz el PP en Cádiz, respecto a la propuesta de Adelante Izquierda Gaditana. No se trata de que sea un brindis al sol. De ahí que apoye la propuesta del PSOE que defiende la necesidad de elaborar un informe técnico que permita analizar «las ventajas y desventajas que supondrá implantar esa tasa».
La apuesta por un turismo sostenible, sin ser categóricos, debe ser una prioridad para cualquier ciudad de la provincia de Cádiz. Otra cuestión muy diferentes es imponer un canon por el mero hecho de prohibir y cobrar.