OPINIÓN
Santiago Segura calienta, una vez más, la taquilla
No serán, como digo, películas laureadas pero su auténtico premio es el público que dicta sentencia
Un año más, un verano más, Santiago Segura revienta las taquillas. Tiene la fórmula del éxito. Ya lo hizo años atrás con Torrente y las numerosas secuelas que generó y lo hace ahora con «Padre no hay más que uno» que se ha asomado a ... las pantallas esta misma semana en su cuarta entrega.
Desde el primer día la nueva película de Santiago Segura ha arrasado en taquilla. El miércoles 17 de julio llevó a las salas a 160.000 espectadores y convirtiéndose en el mejor debut para la saga.
La fórmula no está gastada y verano tras verano los niños llevan a sus padres a ver las aventuras caseras de una familia de clase media en que muchos se reconocerán.
Todo es previsible. No hay excesivas sorpresas, pero Santiago Segura y los suyos invitan siempre a pasar un buen rato a los espectadores menudos que están convirtiendo en tradición eso de acudir al cine a ver a su segundo «padre».
Al cineasta le dan un poco igual las criticas y que sus películas siempre sean olvidadas en cualquier palmarés. De los Goya mejor no hablamos, aunque la irrupción del joven Segura en el cine español con el primer «Torrente» le generase más de una estatuilla. Ahora sabe que sus películas cuentan con el favor del público y sabe que los espectadores son su mejor aval. Las taquillas millonarias de sus películas son un soplo de aire fresco para las arcas del conjunto de nuestro cine. Santiago Segura es un francotirador que va por libre y ha encontrado la fórmula del éxito con guiones sencillos, un grupo de actores que se ha asentado en los papeles que representan desde la primera entrega como Toni Acosta, Leo Harlem, Silvia Abril o Loles León y además, consigue que sus películas tengan una cuidada factura técnica.
En esta cuarta película de la saga la hija mayor ha cumplido 18 años y decide casarse. ¿Cómo reaccionara cualquier padre ante una situación de este tipo? Esa respuesta tendremos que encontrarla en la pantalla. O lo que es lo mismo pasar por taquilla.
A mí no es el cine que más me gusta, pero reconozco que siempre invita a una sonrisa y que los más pequeños viven intensamente cada una de sus. Los niños son el motor del cine y los que arrastran a sus padres a las salas.
No serán, como digo, películas laureadas pero su auténtico premio es el público que dicta sentencia.
Mientras Santiago Segura sigue a lo suyo, fabricando éxito tras éxito y haciendo suyo un dicho muy popular: «Ande yo caliente ríase la gente». La saga Padre no hay más que uno; los entregas de «A Todo tren …» o «Vacaciones de verano» que arrasó en su estreno, avalan la carrera de este cineasta que se siente a gusto haciendo disfrutar a la gente menuda.