OPINIÓN
Cine o glamour
Más modestos son otros muchos certámenes que se celebran a lo largo y ancho del mundo como la Muestra Cinematográfica del Atlántico, «Alcances» que se celebra desde finales de los años sesenta en Cádiz
Las pantallas se van desperezando ante la nueva temporada. Agosto suele ser un mes en que se estrenan muchos títulos escondidos en el cajón de las distribuidoras, aunque algunos, como hemos visto aquí, son buenas películas. Esta nueva temporada viene marcada, como todos los años , ... por la celebración de dos de los festivales más importantes del mundo, Venecia que ya está en su última semana y San Sebastián que comenzará en unos días. Ellos junto a Berlín y Cannes configuran el póquer de certámenes más importantes del mundo, donde se dan cita los mejores directores, actores y actrices que muestran sus últimos trabajos que encontrarán refrendo, primero en las salas y posteriormente en las plataformas que se extienden por hogares de todo el mundo. En estos festivales la calidad de los trabajos presentados irá casi a la par con el glamour de los asistentes a las galas y los estrenos que es otra de las señas de identidad de estos certámenes europeos . Cine sí, mucho cine, pero gente guapa a la que fotografiar y marque tendencias en la moda.
Más modestos son otros muchos certámenes que se celebran a lo largo y ancho del mundo como la Muestra Cinematográfica del Atlántico, «Alcances» que se celebra desde finales de los años sesenta en Cádiz y que desde 2015, es uno de los referentes del cine documental en nuestro país. Yo conocí los primeros años del certamen cuando los ya desaparecidos Fernando Quiñones y José Manuel Marchante , empezaban su andadura al frente del festival y llevaron a Cádiz un cine que estaba vedado a las ciudades pequeñas acercando a los espectadores, por ejemplo, a cineastas y películas latinoamericanas o de países del este europeo.
Como Benalmádena en Málaga, «Alcances» llevó a Cádiz un cine de autor que solo se veía en las llamadas salas de arte y ensayo de Madrid y Barcelona. Películas subtituladas que atraían a los cinéfilos y permitían a los espectadores ver otro tipo de cine muy alejado de Hollywood o de las comedias hispanas de López Vázquez o Alfredo Landa.
«Alcances» en sus primeros años, se inauguró en 1968, no solo ofertaba cine, sino que ampliaba su programación a otras actividades culturales como la literatura, la música clásica, el flamenco o exposiciones de toda índole. Eran los últimos años del franquismo y había un enorme interés por conocer lo que sucedía en el mundo , sorteando la censura que marcaba nuestra vida cultural. Quiñones fue un pionero entre los programadores culturales de nuestro país y Marchante siguió su línea, aunque volcándose más hacia el cine y buscando una dimensión más internacional.
Lo mejor de «Alcances» es que siga en pie , aunque haya variado su filosofía y ahora mire al documental y al cortometraje. Entre tanto glamour y frivolidad en los grandes certámenes , «Alcances», hoy Festival de Cine Documental de Cádiz, se detiene en el trabajo de quienes buscan abrirse camino en el mundo del cine o quieren mostrar la realidad que nos trasmiten las películas documentales.