OPINIÓN
Adiós Huelva. Sigue el cine
Trece películas concursaron por los principales premios, algunas muy interesantes, pero con escaso recorrido comercial
Con Huelva cerrando las puertas de su edición número cincuenta, medio siglo llevando el cine iberoamericano a la ciudad y su provincia, el calendario de festivales de cine parece detenerse ante la proximidad de las fiestas navideñas. Trece películas concursaron por los principales premios, algunas ... muy interesantes, pero con escaso recorrido comercial. Será difícil que veamos alguna en nuestras salas y si lo hacen y como ya hemos comentado aquí, en alguna ocasión, solo irán a las grandes ciudades como Madrid y Barcelona.
En Cádiz veo en la cartelera que está Gladiator 2, una película espectacular y entretenida y junto a ella observo con satisfacción que siguen dos títulos españoles estrenados hace varias semanas como, son los casos de «Soy Nevenka» e «Infiltrada» y se les une otro estrenado hace unos días «Marco». Las tres películas figuran en las quinielas de los principales premios de este año que arrancan con los Forqué , el próximo 14 de diciembre.
Mientras, ya digo, sigue el cine con la avalancha de estrenos de todas las semanas. Este viernes he contado hasta catorce novedades, de las que he tenido ocasión de ver media docena provenientes de distintos países y con temáticas muy diferentes. Me dicen en la distribuidora que llegará a Cádiz «Vigilante nocturno: Demonios heredados», una película de terror danesa que es un remake de la que dirigió en 1994, el propio director Olë Bornedal.
«El vigilante nocturno»(1994) se convirtió en una película de culto y treinta años después Olë Bornedal vuelve a los personajes y a la historia centrada en un asesino en serie, con claras influencias del doctor Lecter y el «Silencio de los corderos» ,de Jonathan Demme estrenada en 1991.
Pasadas tres décadas y con un remake dirigido en EEUU, el director danés recupera a dos de los tres protagonistas de su primera película en una trama en que el mayor miedo no viene de una amenaza externa, sino de nuestros propios demonios, de los traumas que heredamos.
La protagonista, que es la propia hija del director, Fanny Leander Bornedal, es una joven estudiante de medicina que se ofrece para trabajar de vigilante nocturna en la morgue, donde su padre estuvo a punto de morir a manos de un asesino en serie y cuyas consecuencias arrastró toda su vida, incluido el suicidio de su mujer que no pudo soportar la tensión que vivió cuando el asesino, un oficial de policía, pudo acabar con todos, incluido un íntimo amigo.
Emma quiere conocer realmente que ocurrió y que pasó con aquel asesino. Aunque la narración resulta un tanto previsible «El vigilante nocturno: Demonios heredados» mantiene un clima de tensión y suspense con crímenes incluidos sin demasiada sangre , lo que es de agradecer. Es una película que recupera el tono clásico del género de terror que, se ha instalado en la cabeza de todos aquellos que vivieron situaciones límite, treinta años atrás. Segundas partes también pueden ser entretenidas.