editorial
La letra pequeña de la 'excepción ibérica', en el recibo
La letra pequeña de la llamada 'excepción ibérica' contiene un mecanismo que viene endosando en el recibo de la luz de los consumidores

Ya son más de la mitad de las familias españolas a las que se cargan las compensaciones a las eléctricas por el tope del precio del gas, de tal forma que el ahorro de la factura es menos del que proclama el Gobierno. La letra pequeña de la llamada 'excepción ibérica' contiene un mecanismo que viene endosando en el recibo de la luz de los consumidores parte del desajuste entre el mercado real y el precio al que España opta a ese gas.
Teniendo en cuenta que más del 30 por ciento de la energía producida para atender a la demanda de julio provino de esa fuente, la compensación ha ido creciendo. Sin duda, las medidas adoptadas abarataron la factura, por eso no se entiende que el Gobierno no haya explicado a los españoles que existen esas compensaciones y que el abaratamiento, por un lado, ha tenido un encarecimiento por otro, aunque este sea lógicamente menor. De nuevo, el Ejecutivo opta por mostrar solo una cara, la amable de su medidas, y por ocultar la más antipática. La situación es tan complicada y ante el problema de la energía la sociedad necesita luz y taquígrafos.