OPINIÓN
Fiesta de la lectura
La idea me intriga. Me gustaría probarlo; creo que puede ser una oportunidad interesante para conectar con personas que comparten gustos similares
No todo lo que viene de fuera, esas «americanadas» que copiamos en redes sociales o, que antes veíamos en programas de televisión, es una tontería sin sentido. Hay cosas que, sin duda, vale la pena adoptar.
Recientemente leí en Facebook un artículo sobre algo llamado ... Fiesta de la lectura, que ha comenzado a organizarse en Zaragoza. Es una moda importada de Estados Unidos, y, sorprendentemente, esta vez me parece que tiene sentido. Creo que, por primera vez en mi vida, voy a estar de acuerdo con una tendencia.
Siempre consideré las modas una frivolidad. Me da la impresión de que quienes están obsesionados con seguirlas, solo por «estar al día», terminan perdiendo esa esencia que define a las personas auténticas. Pero esta Fiesta de la lectura me parece algo diferente, incluso original.
Por lo que entendió, consiste en reuniones entre lectores. Se juntan para disfrutar de un café, un chocolate o un té, pero, sobre todo, para leer. Es una reunión donde los asistentes leen en directo, compartiendo el tiempo y el espacio con otros amantes de los libros. La idea me intriga. Me gustaría probarlo; Creo que puede ser una oportunidad interesante para conectar con personas que comparten gustos similares.
En estas fiestas, todos los asistentes leen el mismo libro por intervalos de veinte o treinta minutos. Al finalizar cada tramo de lectura, comparten sus impresiones, charlan sobre lo leído, intercambian ideas y aprenden unos de otros.
No sé si esta iniciativa llegará algún día a Cádiz, pero espero que sí. Sería fantástico que empezaran a surgir Fiestas de la lectura aquí también. Se me ocurre que una librería sería el lugar ideal para celebrarlas. Lo dejo como una sugerencia en el aire, por si alguna de nuestras maravillosas librerías se anima a organizar algo así.
Además, creo que este tipo de actividades son una forma encantadora de fomentar la lectura. Muchas veces se asocia el mundo de los libros con algo aburrido, pero en realidad es todo lo contrario. Algún escritor —cuyo nombre no recuerdo ahora— dijo que los libros y las estanterías son el almacén perfecto de aventuras. Y tenía toda la razón.