Opinión
Juicio de valor
«Como verán ha sido un año plagado de incertidumbres. Este nuevo que entra va a ser un año clave»
entro de muy pocas horas estaremos despidiendo este 2022 que se nos va y brindaremos por la entrada del nuevo año que nos llega, el 2023. Parece que fue ayer, hace un suspiro, que comenzó este que se nos marcha. En estos doce meses hemos ... vivido acontecimientos y situaciones que jamás habríamos sospechado.
La invasión que Rusia perpetró a partir del 24 de Febrero en la región del Dombás de Ucrania supuso el desencadenante de una guerra, que aún se mantiene activa, y que aunque sigue localizada a las puertas de la mismísima Unión Europea en cualquier momento podría involucrar a las fuerzas de la OTAN y globalizarse con el grave riesgo de desencadenar un tercer conflicto mundial de consecuencias imprevisibles.
Este conflicto nos está afectando a todos. Si aquí no sufrimos los bombardeos que padecen las ciudades ucranianas, las carencias del gas ruso y la falta de suministro de sus productos de exportación están incidiendo negativamente en nuestra economía. Si a esto añadimos la ola de migraciones que se está produciendo desde esta zona de conflicto, sus consecuencias no pueden dejarnos indiferentes. También nuestro país ha estado lleno de acontecimientos que nos han creado gran incertidumbre. Ha sido este el año de los bonos, el Gobierno creó el bono social eléctrico para abaratar la factura de la luz y para los jóvenes el bono del alquiler y el cultural que cada uno empleo según le convino.
Hemos sufrido olas de calor con temperaturas que han batido récord e incendios que han arrasado casi trescientas mil hectáreas. Han aparecido nuevas leyes como la del aborto, la ley trans y la del «sólo sí es sí» que han creado grandes tensiones incluso en el seno del Ejecutivo.
La huelga de los sanitarios, que con razón aún colea, se ha desencadenado al volver a la normalidad tras la pandemia y ha dejado en evidencia la debilidad de un sistema sanitario que todos creían inmejorable. La sanidad pública ha colapsado por su base, la atención primaria, y si no se remedia pronto tendremos que atenernos a sus consecuencias. También la justicia ha sido protagonista negativa en estos doce meses y sobre todo por la incapacidad de los políticos en abordar la renovación de sus órganos de gobierno y por los reproches lanzados contra ellos desde los socios del señor Sánchez.
Ni que decir tiene que a todos nos han sorprendido muchas decisiones de nuestros máximos gobernantes en diferentes asuntos como la relaciones con Marruecos, la abolición del delito de sedición y la modificación del delito de malversación. No sabemos aún que trascendencia tendrán estas en un futuro pero sin duda no parece que sean muy halagüeñas.
Como verán ha sido un año plagado de incertidumbres. Este nuevo que entra va a ser un año clave. Esperamos que se reconduzca el conflicto ucraniano y que las nuevas medidas adoptadas últimamente por el gobierno alivien la crisis económica que sufrimos.
Al ser un año electoral, primero municipales y luego generales, espero que los ciudadanos, amparados en nuestra Constitución de 1978 aún vigente, sepamos poner a cada uno en su sitio y manifestemos nuestro juicio de valor a todo lo que está ocurriendo.