OPINIÓN
Efemérides
Nunca antes habíamos vivido un periodo de prosperidad, con sus altibajos incluidos, como este
Cuando hablamos de los astros, referirse a una efeméride es hablar de una tabla de valores que nos da las posiciones de los objetos astronómicos en el cielo en un momento dado. Para entendernos, una simple coordenada temporo espacial, que nos sitúa en algún lugar, ... en algún tiempo determinado, en la esfera celestial. Las efemérides se utilizan para la navegación celestial y astronómica, como si fuera una Estrella Polar que no cambia de rumbo ni derrota en el techo celestial. Desde el uno de enero del año cero, de nuestra era, han transcurrido exactamente 739.283 días. Han sucedido muchos acontecimientos, guerras con sus derrotas y victorias, nacimientos y muertes, días de inventos e inauguraciones, eventos y celebraciones, momentos para olvidar y otros que merecen ocupar un lugar destacado en la galería de las maravillas de la humanidad, algunos de corto recorrido y otros de una magnificencia a prueba de generaciones. Por la idiosincrasia positiva, y siempre proactiva de la mente humana, siempre tendemos a celebrar acontecimientos positivos, los negativos suelen caer en el saco del olvido de lo que nunca debió suceder. Este año 2025 debe servir para conmemorar la época más gloriosa de la historia de nuestro país. Nunca antes habíamos vivido un periodo de prosperidad, con sus altibajos incluidos, como este. Nunca antes los derechos y el estado del bienestar habían alcanzado cotas tan altas. Nunca antes el dialogo, a pesar de la crispación subyacente, se había usado como norma fundamental del entendimiento. Sin tener porque añorar un imperio, podemos disfrutar de una democracia madura y consolidada, que como dice Pericles en su Discurso «es cuando la administración se ejerce en favor de la mayoría y no de unos pocos, respetando las leyes, y donde todas las personas gozan de iguales derechos en la defensa sus intereses particulares». Viene a mi memoria infantil la conmemoración de los «veinticinco años de paz» en 1964, eufemismo de cinco lustros de represión. Empezamos el año con una importante efeméride, «50 años de España en Libertad».
Para los unos, no hace falta recordar la muerte del dictador, al que le llegó la muerte en su cama. Para los otros, habéis perdido la oportunidad de conmemorar el inicio de la mejor época de la historia de nuestro país, y sumarse así al enaltecimiento de nuestra Democracia.