Hazte premium Hazte premium

El batallón de los perplejos

El mesías de Tetuán

La orografía del sanchismo está recorrida por una cordillera de mentiras, trolas formidables que se hacen pasar por verdades como puños para nuestra salvación. En breve, el doctor puede descubrir la penicilina o el Mediterráneo. Atentos

Álvaro Martínez

Esta funcionalidad es sólo para registrados

Entre las características del sanchismo encuentra este batallón una que sobresale de las demás. Se trata de su redentorismo, que descuella en una doctrina que supone un mezcladillo de lo políticamente correcto, del tradicional alpiste progresista y de las ínfulas de una insólita superioridad moral ... y ética sobre otras ideologías. Y esa función mesiánica, de rescate de los españoles o conquista de hitos para una más alta felicidad colectiva, pasa por borrar el pasado cuando a los socialistas no les es favorable o simplemente no encaja con esa labor salvadora y/o pionera. De un señor que se autodefine en un libro como «Pedro el guapo» no caben esperar menos alharacas, albricias y aleluyas a su augusta figura y singular obra. Nada de lo que un sanchista considere bueno ha ocurrido antes en España, todo lo positivo es gracias a ellos, de tal forma que hasta en el caminar de Neil Armstong sobre la Luna ya se intuía que Pedro Sánchez iba a nacer tres años después. Y para el autoelogio no les importa mentir, con sorprendente descaro si cabe, pues no es habitual ese desahogo si no se tiene la convicción de que los ciudadanos son bobos y no se enteran.

Artículo solo para suscriptores

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación