José María Carrascal
Una mala y sucia copia
Hoy, o te hundes con la España que tenemos o luchas para mantenerla. Así de simple
Ya sabemos cómo Cataluña se convertirá en república independiente . Incluye, como era de prever, la salida del Ejército español, la expropiación de todos los bienes del Estado, la doble nacionalidad para quienes lo deseen y la apertura de un proceso constituyente. Junto a otros rasgos inquietantes: la Generalitat nombrará la cúpula judicial –adiós separación de poderes–, una Administración bien atada y el sobreseimiento de todos los procesos penales por la causa soberanista. Lo curioso es que hasta en el nombre, " ley de transitoriedad ", parece una copia de la Transición española , la que, "de la ley a la ley", nos llevó del franquismo a la democracia. Con una abismal diferencia: aquélla respetó la legislación vigente. Ésta no respeta ninguna, incluido el Estatuto catalán, que exige los dos tercios de electores para el cambio y ahora basta un solo voto. Más importante: las Cortes franquistas tenían poderes para cambiar el régimen. El Parlament, cuyos poderes le vienen de la legislación vigente, no los tiene, y menos, para alterar la estructura de España. Actúan como si fueran ya independientes. De hecho, estamos ante un gigantesco timo, ante un mal disimulado golpe de Estado que viola la legalidad nacional, internacional y catalana. Cobarde también, al no dar la cara los perpetradores.
"Entonces, me dirán ustedes, ¿por qué el gobierno no actúa? Si alguien anuncia que va a cometer un asesinato, un robo u otro delito, las autoridades están obligadas a impedírselo". También me lo pregunté yo. Hasta caer en lo que podríamos llamar "servidumbres de la democracia". Lo que han anunciado los cuatro fantoches en Barcelona es un "proyecto de ley", no una ley. Y hasta que esa ley no sea aprobada, pueden estar amparados por la libertad de expresión, metiéndonos en un berenjenal jurídico. Puede incluso ser lo que pretenden: montar un cirio. Y no digo nada si el gobierno mete a alguno en la cárcel. Les encantaría ver su foto entre dos guardia civiles en el NYT.
Hay que esperar a que esa ley sea admitida a trámite. Entonces, sí. Entonces actuar con contundencia. Inhabilitaciones, multas, artículo 155 si es necesario. Que caiga sobre esos tramposos todo el peso de la ley que se han cansado de violar. Si los mossos se niegan a hacerlo, ahí están la Guardia Civil y la Policía Nacional . Las contemplaciones se habrán acabado, como la paciencia.
¿Qué harán los demás partidos, el PSOE sobre todo? ¿Se dejará Pedro Sánchez llevar por su ansia de sustituir a Rajoy, al que hoy asaetearán en el congreso por la financiación del PP, o comprenderá que la orden del día es impedir la secesión de Cataluña? Ha telefoneado a Rajoy prometiéndole su apoyo en este frente. Pero se lo ha prometido varias veces, para arremeter contra él junto a Iglesias y los nacionalistas, que necesita para llegar a la Moncloa. Imagino que intentará nadar y guardar la ropa con la plurinacionalidad y demás. Pero hoy, o te hundes con la España que tenemos o luchas para mantenerla. Así de simple. Y dramático.
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