EDITORIAL ABC
La ineficacia circulatoria de Ahora Madrid
Lo mínimo que cabe exigir a las autoridades municipales es un grado de certidumbre, transparencia y capacidad de la que, por desgracia, no han hecho gala a la hora de aplicar estas y otras restricciones
LA gestión del Ayuntamiento de Madrid en materia de tráfico se ha caracterizado por la improvisación y la ineficacia , con el consiguiente perjuicio para el elevado volumen de conductores que hacen uso de su coche privado para ir a trabajar o moverse habitualmente por la ciudad. Prueba de ello es la falta de información y el alto grado de incertidumbre que, una vez más, ha causado Ahora Madrid tras la activación del protocolo contra la contaminación del pasado fin de semana. A la limitación de velocidad de 70 kilómetros por hora en el interior de la M-30 y la prohibición de aparcar en el centro de la ciudad a los no residentes, se suma ahora la posibilidad, por primera vez, de restringir el tráfico a la mitad de los vehículos en función de su número de matrícula hasta que se reduzcan los niveles de dióxido de nitrógeno de los últimos días.
Más allá de la mayor o menor efectividad de este tipo de medidas, lo mínimo que cabe exigir a las autoridades municipales es un grado de certidumbre, transparencia y capacidad de la que, por desgracia, no han hecho gala a la hora de aplicar estas y otras restricciones, provocando con ello una confusión gratuita e innecesaria a millones de conductores que, en ocasiones, se traduce en multas y, en el peor de los casos, en una grave situación de caos circulatorio . La activación de este protocolo debe ir acompañada de una cuidadosa y detallada planificación previa y de un amplio despliegue informativo, en coordinación con otras administraciones, para aumentar los agentes de movilidad, plantear alternativas viables y suficientes al automóvil y reforzar el transporte público con el fin de causar el menor daño posible al conjunto de los ciudadanos.