Ejemplo de valores
Era Juan Pablo la voz recia, el análisis templado, el espíritu independiente, el periodismo profundo, el coraje moral, la honestidad en el trabajo
Era Juan Pablo la voz recia, el análisis templado, el espíritu independiente, el periodismo profundo, el coraje moral, la honestidad en el trabajo. Era el compañero ideal, el amigo fiel, el padre entregado, el hombre de principios, el observador que nunca perdía el sentido de la orientación en medio del caos. Era la sonrisa de filo irónico que casi podía verse a través de la radio. Era el profesional íntegro, bien informado, atento, lúcido, cálido, sensible, humano. Era el comentarista serio, alejado de la banalidad y el populismo informativo, enemigo del ruido trivial, de la noticia-espectáculo, de la opinión ligera, del juicio temerario. Era el ejemplo de solvencia, de humildad, de valores sólidos, de criterio sensato. Y su ausencia imprevista, precipitada, injusta, es un estacazo en el alma, un golpe helado, que diría Miguel, un abismo de orfandad, un maldito descalabro. Nos queda el privilegio de tantas noches escuchándolo y el regalo de haber compartido cientos de programas de su lado. Se ha ido un imprescindible. Descansa en paz, hermano.
