Tribuna abierta
Anticuerpos para salvar la democracia
![Giuseppe Tringali: Anticuerpos para salvar la democracia](https://s3.abcstatics.com/media/opinion/2021/01/08/CAPITOLIO-k7qC--1200x630@abc.jpg)
Las imágenes de ayer en el Capitolio americano, en el templo de la democracia mundial, nos tienen que hacer reflexionar. La democracia, donde se ha sabido conquistar, es el logro mas grande de la humanidad. No obstante, nunca, como hemos visto, podemos darla por garantizada. Los valores fundamentales en los países democráticos son la libertad y la posibilidad de crítica para mejorar el sistema. Cuando en democracia vivimos crisis difíciles, el riesgo de que éstas y el malestar social, comparables a un sistema inmunológico debilitado del Estado, sean utilizados por parte de los virus populistas de derecha o de izquierda, son altísimos.
Con el populismo, el riesgo de derivas autoritarias cobra fuerza y se hace real. La Historia nos enseña que estos han nacido de una utilización demagógica del malestar social y han llegado a generar dictadores, independientemente de los colores políticos ya que, en mi opinión, no existen dictadores mejores o peores ni a la derecha ni a la izquierda: existen solo dictadores.
Dictadores que se hacen fuertes aprovechando las críticas sociales permitidas gracias a la Democracia, para después, cuando llegan al poder, vetarlas junto a las libertades individuales. Cuando unilateralmente se ponen en discusión las Constituciones, las instituciones, la división de poderes o el papel de los medios de comunicación, es el momento en el que se imponen los «anticuerpos» para atajar el autoritarismo ante una potencial dictadura.
Los «anticuerpos» no son otros que las distintas instituciones, los políticos responsables y los ciudadanos que deben actuar para defender la democracia conquistada siempre con enormes sacrificios sociales y humanos.
Esto tienen que tenerlo claro todos: políticos y ciudadanos; recordar o estudiar la historia es la mejor vacuna para aumentar los anticuerpos. Ser capaces de aprender de ella para no repetir errores imperdonables es la verdadera inteligencia de la humanidad.