Miradas sobre la pandemia

Aislamiento: una oportunidad para entender que somos seres sociales

«Para crecer emocionalmente, como personas, necesitamos el contacto humano»

Giuseppe Tringali

Giuseppe Tringali

Esta funcionalidad es sólo para registrados

He pasado, como todos, más de dos meses y medio en casa , saliendo solo para lo necesario pero, por suerte, no en soledad. Mi nuera y mi hijo, que viven en Madrid, me quisieron en su casa. Me considero afortunado por tener su amor y poder tener la ocasión de amarles más de cerca.

Estaba acostumbrado a salir todos los días, a tener reuniones, encuentros con personas interesantisimas, entrevistas sobre distintos temas... Pasaba los fines de semana en Milán con mi mujer y mis pasiones a dos y cuatro ruedas; o en Londres, con mi nuera, mi hijo y mis nietos; o las muchas cenas de amigos en los días madrileños...

No puedo hacer lo que hacía, pero, como he dicho, soy afortunado porque estoy bien, en casa de mi hijo y mi nuera disfrutando de su compañía.

En estos días he pensado y pienso en los familares que no tengo cerca, en los amigos y sus familias . He pensado en las personas vulnerables, en las personas enfermas a las que han dejado solas, en sus familiares... Pienso en todos los que están expuestos por motivos laborales en el sistema sanitario, en el sistema de reparto, en los supermercados o en las farmacias.

Acostumbrados a la libertad, estar encerrados en casa no es nada fácil , pero la escasa preparación y la emergencia sanitaria lo han hecho inevitable.

Hoy se considera afortunado a quien no ha sido contagiado o ha pasado el virus sin saberlo o en manera leve. Estar en casa para cuidarse y para cuidar a los demás ha sido una responsabilidad y, en el momento en el que tengamos más libertad de movimiento, tendremos que mantenernos responsables y seguir las normas básicas para evitar a volver a vivir otra emergencia.

Mirando lo positivo, quien ha estado en familia ha tenido la posibilidad de disfrutar de ella, cosa difícil de conseguir en tiempos normales . Además, afortunadamente, la tecnología ha permitido estar conectados, visualmente y desde casa, con el mundo, con la familia, con los amigos o con el trabajo. Yo he seguido escribiendo artículos, haciendo entrevistas, videoconferencias... La tecnología nos ha permitido estar entretenidos con información, películas, documentales, música, libros físicos y digitales, etc.

A veces pienso como hubiéramos pasado esta situación sin conexión. Aunque he aprovechado para pensar, leer, escribir y ver series –lo que está genial–, sigo echando mucho de menos la libertad, la sociabilidad y el contacto con otras personas. Echo de menos ver físicamente a mis familiares, a los amigos, a personas interesantes o el conocer a nuevas personas con las que sorprenderme por su inteligencia, sabiduría o empatía.

Creo que no somos totalmente autosuficientes . Para crecer emocionalmente, como personas, necesitamos el contacto humano, necesitamos escuchar y aprender de los demás con todos los sentidos.

Necesitamos sentirnos apreciados, amados y, también, criticados o puestos en discusión para avanzar y ser mejores personas. Necesitamos amar, sentirnos útiles, ayudar, compartir ideas y proyectos de trabajo y de vida , necesitamos compartir sueños, compartir nuestras preocupaciones o nuestra felicidad.

Sin todo esto perdemos aprendizaje y energía para superar las dificultades y los obstáculos que encontramos en el camino: aprendizaje y energía para la acción, para la creación...

Nuestro posCovid-19 tiene que tener en cuenta todo esto. Tengo claro que no podemos renunciar a nutrirnos de la inteligencia colectiva, de las culturas, de las relaciones humanas, de una mirada, de unas palabras, de un gesto, de un abrazo o de un beso para poder sentir y transmitir el amor por la vida y las vidas.

Esta es la esencia de la humanidad; y esta esencia tiene que ser el motor para superar el miedo, la incertidumbre y volver más fuertes que nunca, todos juntos, para mejorar nuestra convivencia y nuestro entorno.

* Giuseppe Tringali es vicepresidente del International Advisory Board del IE y presidente del Global Corporation Center EY/IE.

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación