Editorial
Unos Presupuestos de quita y pon
Las enmiendas introducidas a última hora por el Gobierno y sus socios en el texto de los Presupuestos Generales del Estado van a impedir que los departamentos afectados logren cuadrar sus cuentas y cumplir con sus propias previsiones de gasto
Las enmiendas introducidas a última hora por el Gobierno y sus socios en el texto de los Presupuestos Generales del Estado -cesiones en pago a los apoyos parlamentarios necesarios para sacar adelante las cuentas, con ERC, Bildu, el PNV y el PDECat como beneficiarios- van a impedir que los departamentos afectados logren cuadrar sus cuentas y cumplir con sus propias previsiones de gasto. Sin asignación de fondos específicos, y como muestra de la opacidad con que el Gobierno trata de tapar su debilidad, estas enmiendas tendrán que ser financiadas a través de la técnica popularizada por María Jesús Montero -«lo he dicho siempre, chiqui, son 1.200 millones, eso es poco, eso lo quitas o lo pones en una parte del presupuesto»-, con el agravante de que es el propio Ministerio de Hacienda, presunto vigía del rigor presupuestario, el que se niega a evaluar y poner negro sobre blanco el coste de unas partidas metidas con calzador y sin previsión de costes.