Editorial
Servicio público o interés partidista
En vísperas de las elecciones autonómicas de Madrid conviene establecer y determinar las verdaderas funciones que desempeña el jefe de Gabinete de Sánchez
La ofensiva parlamentaria lanzada por el PP para forzar al Gobierno a hacer pública la actividad de Iván Redondo y su equipo durante la precampaña y la campaña catalanas no solo representa un regenerador ejercicio de transparencia institucional, sino que apunta directamente a la maquinaria propagandística que, ajena al interés general, articula la labor de un Ejecutivo basado en la imagen, el eslogan y el efectismo. Fue el propio Salvador Illa quien la misma noche electoral no tuvo empacho en agradecer públicamente la labor desarrollada por Redondo en aquellos comicios. En vísperas de las elecciones autonómicas de Madrid, y con Pedro Sánchez volcado en una agresiva campaña de acoso contra Díaz Ayuso, conviene establecer y determinar las verdaderas funciones que desempeña el jefe de Gabinete de Sánchez, dedicado al servicio público -al que está obligado- o al diseño de estrategias de partido, ya sea en Cataluña, Murcia o Madrid.