Editorial
El separatismo invierte en su supervivencia
Presentado ayer en el Parlamento regional, el proyecto de presupuestos de Cataluña lo fía todo al gasto: 38.139 millones de euros, con un aumento del 17,3 por ciento
Presentado ayer en el Parlamento regional, el proyecto de presupuestos de Cataluña lo fía todo al gasto -38.139 millones de euros, con un aumento del 17,3 por ciento- y renuncia a la racionalización de un erario inflado por las ayudas de la UE y las cesiones de Sánchez. En el ‘totum revolutum’ del separatismo no es fácil determinar qué partidas van a parar al programa secesionista, beneficiado por la transversalidad ideológica y la convergencia pragmática de unos departamentos que se refuerzan con casi 30.000 funcionarios. Más Cataluña, menos España. Basta, sin embargo, con analizar la cuenta de Acción Exterior -propaganda internacional- para hacerse una idea aproximada de la finalidad de los fondos que maneja la Generalitat: un total de 94 millones (con un 21 por ciento de aumento) se van a destinar a denunciar en el mundo la represión que sufre Cataluña. No vendría mal ese dinero para restaurar la imagen internacional de la región y tratar de devolver la confianza a los inversores.