Editorial
Marruecos recurre al tono belicista contra España
Ayer, el Parlamento de Marruecos declaró a Ceuta «ciudad ocupada», lo que demuestra que los modos y maneras propias del lenguaje diplomático ya empiezan a dar paso a un tono cuasi-belicista
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Marruecos no ceja en su empeño de agitar la tesis de una próxima ruptura de relaciones con España. El talante de sus nuevos mensajes deja poco lugar a la duda sobre su pretensión de elevar el chantaje a nuestro país hasta el límite. Ayer, el Parlamento de Marruecos declaró a Ceuta «ciudad ocupada», lo que demuestra que los modos y maneras propias del lenguaje diplomático ya empiezan a dar paso a un tono cuasi-belicista. A la vez, Rabat reiteró su tesis de que el conflicto tiene un carácter bilateral entre los dos países, y que nada tiene que ver con la Unión Europea. Marruecos no dice la verdad. Solo agita su propaganda para debilitar al Gobierno de Pedro Sánchez porque ni Ceuta es una ciudad «ocupada», ni la Unión Europea se va a desvincular de este preocupante conflicto. Sin embargo, la imagen de pasividad y fragilidad internacional que está ofreciendo el Ministerio de Asuntos Exteriores es exasperante. Y eso solo envalentona al régimen marroquí en esta extorsión antidiplomática.
