Editorial
La ilegal inmersión lingüística en los campus de Cataluña
El Ejecutivo separatista ahora está dispuesto incluso a vulnerar la norma autonómica que dicta, en su artículo 35, que profesores y alumnos tienen derecho a expresarse en los campus en la lengua oficial que elijan
Además de un suicidio para su prestigio académico y la internalización de sus claustros y alumnados, la pretensión de la Generalitat de ‘catalanizar’ la universidad infringe el propio Estatuto de autonomía. Acostumbrado a saltarse las leyes estatales, a desatender incluso el cumplimiento de las sentencias de los tribunales, el Ejecutivo separatista ahora está dispuesto incluso a vulnerar la norma autonómica que dicta, en su artículo 35, que profesores y alumnos tienen derecho a expresarse en los campus en la lengua oficial que elijan, algo imposible con el devastador plan de inmersión en las universidades de la región que contempla que el 80 por ciento de las clases se den en catalán. El plan es por tanto ilegal pero sin duda también es obtuso pues herirá de manera irreversible a los campus, esos en los que se van a habilitar buzones de denuncia a los profesores que hablen castellano a los que el ‘régimen indepe’ seguramente purgará.