Editorial
El empleo sigue sin remontar en España
El lento ritmo de la vacunación ha vuelto a lastrar las esperanzas de que España, avanzado el año, recuperase oxígeno laboral
Tenía razón la vicepresidenta Nadia Calviño cuando avanzó que los datos de paro conocidos ayer no iban a ser buenos. Las cifras no son ni siquiera alentadoras en un mes de repuntes del empleo estacionario, como es marzo, por la cercanía de la Semana Santa y el inicio de la temporada alta turística. El dato objetivo es que hay más de 400.000 desempleados más que en marzo del año pasado, primer mes de la pandemia, y que la legión de españoles inmersos en ERTE apenas se rebaja. Es positivo que la cifra de parados consignados como tales haya vuelto a bajar ligeramente de los cuatro millones. Pero no deja de ser simbólico. Se sigue destruyendo empleo, y muchos de los ERTE concluirán en breve en ERE porque la situación no será sostenible para todos. El lento ritmo de la vacunación ha vuelto a lastrar las esperanzas de que España, avanzado el año, recuperase oxígeno laboral. Sin embargo, toca esperar. Este año y el que viene apuntan a ser muy duros en términos laborales.