EDITORIAL
La amenaza de la UE a Polonia toma cuerpo
La amenaza de Bruselas a Polonia es nítida, y aunque dispone a partir de ahora de dos meses para presentar alegaciones, el riesgo de que ese país siga siendo penalizado sin recibir fondos para la recuperación económica se ha acrecentado
La Comisión Europea ha reafirmado su presión contra el Gobierno de Polonia con un nuevo expediente sancionador, y ya son muchos, después de que el Tribunal Constitucional de ese país sentenciase que los tratados europeos son incompatibles con su Constitución y que, en cualquier caso, rige esta última en detrimento de la normativa comunitaria. La amenaza de Bruselas a Polonia es nítida, y aunque dispone a partir de ahora de dos meses para presentar alegaciones, el riesgo de que ese país siga siendo penalizado sin recibir fondos para la recuperación económica se ha acrecentado. El mensaje de la UE es contundente. A la izquierda o derecha ideológica, ningún país miembro puede sustraerse a la legislación común ni a los principios y valores inherentes a la unidad política y económica. Y si lo hace, se expone a excluirse. Bruselas no puede ceder al intervencionismo ni al autoritarismo de aquellos países que quieran quedar por encima de las normas y principios que a todos nos vinculan.