Cataluña desacredita a Sánchez
La encuesta de GAD3 para ABC señala que los españoles suspenden la estrategia buenista del líder socialista y que la mayoría pide que se vuelva a aplicar el artículo 155 de la Constitución
![Cataluña desacredita a Sánchez](https://s1.abcstatics.com/media/opinion/2018/12/16/encuesta-dos-voto--620x349-k2QH--620x349@abc.jpg)
Los españoles suspenden de manera abrumadora la política de Pedro Sánchez en Cataluña. Según la encuesta de GAD3 para ABC, el 77 por ciento de los encuestados valoran negativamente la gestión del conflicto separatista por parte del presidente del Gobierno, casi 9 puntos más que en septiembre pasado. El estudio ya refleja el impacto de las elecciones andaluzas, en cuyo resultado influyó decisivamente la cuestión catalana como un asunto determinante de un voto inicialmente local. El revés andaluz ha movido al Gobierno y al PSOE a aparentar -sólo eso- un endurecimiento de sus discursos frente al separatismo, sin llegar al repudio de sus votos, ni a la ruptura de relaciones, ni a la convocatoria de elecciones generales, escenario democrático idóneo para la situación de ausencia de proyecto político que sufre España.
Estos datos son demoledores para el PSOE, porque Cataluña fue la apuesta a todo o nada de Pedro Sánchez cuando llegó a La Moncloa aupado por los separatistas catalanes, los proetarras de Bildu y la extrema izquierda de Podemos. Con ese voluntarismo temerario que caracteriza a los mesías de la izquierda, Pedro Sánchez pretendió hacer creer a la opinión pública española que el problema catalán estaba causado por la intransigencia del PP, y hasta hubo quien dentro de este partido se lo creyó y renegó del recurso ante el Tribunal Constitucional o de la recogida de firmas contra el Estatuto de 2006, esencialmente inconstitucional. La realidad ha puesto imagen a la inanidad política de Sánchez en Cataluña y los españoles la han percibido tal cual es, primero en Andalucía y ahora en la encuesta de GAD3.
La confusión que ha introducido la izquierda en el debate político sobre Cataluña se refleja en la opinión de los encuestados sobre una nueva aplicación del artículo 155 de la Constitución. Hay una mayoría clara a favor de imponer nuevas medidas y más intensas, además, para intervenir en la Generalidad de Cataluña, desenlace cada día más inevitable por el incremento del desafío separatista. También hay un porcentaje no desdeñable de encuestados con una opinión contraria, que debe combinarse con los que suspenden la gestión del Gobierno en Cataluña y los que consideran que la cuestión catalana es sólo el quinto de los problemas para España.
Una conclusión parece clara. Los encuestados ven en Cataluña más un problema político del PSOE y de la izquierda en su conjunto -como ha demostrado Andalucía- que un problema para España. Esta idea se traduce en una desconfianza creciente hacia el PSOE como partido gobernante y en una clara opción del 67,5 por ciento de los encuestados por un anticipo electoral. Lecciones para un Gobierno fuera de la realidad.