Televisión
Paz Padilla estuvo tres días ingresada por Covid
La presentadora gaditana revela en sus redes sociales que tuvo que acudir a un centro hospitalario al empeorar su situación
Paz Padilla, en una imagen de su Instagram personal.
Paz Padilla se infectó de coronavirus hace un par de semanas. Siguiendo las indicaciones médicas, empezó su cuarentena y se confinó en solitario en su casa. Sin embargo, no ha sido hasta ahora que ha revelado que tuvo que se ingresada al sentir una fuerte presión en el pecho.
En el primer fin de semana de su confinamiento, la gaditana se mostraba animada, pero revelaba que no había tenido síntomas reseñables. El aburrimiento hizo que montase un directo en Instagram en el que habló con sus seguidores y con su gran amiga Mónica Fernández, cantante de Materia Prima.
Tras esta publicación, poco más se supo de la presentadora gaditana hasta ahora. Según contaba recientemente una emocionada Paz en sus redes sociales, «Los primeros días fueron muy sencillos, no tenía apenas síntomas pero a partir del quinto día empecé con fiebre, me dolía todo el cuerpo y me costaba moverme del sofá. Todo iba bien hasta que el día octavo una presión en el pecho y me costaba respirar».
Fue en ese momento cuando decidió acudir a un hospital, donde fue excelentemente atendida y acogida por el personal sanitario: «Me hicieron una placa y había niveles muy alterados y problemas de coagulación. Decidieron dejarme ingresada en la planta Covid. Ha sido difícil, estar sola y no saber qué va a pasar y cómo vas a reaccionar bien, o si vas a empeorar».
Paz ha aprovechado para agradecer sentidamente al personal médico, sus hermanos y su hija, Anna Ferrer, el cariño, apoyo y ayuda recibido durante estas duras semanas. Para su hija Anna ha sido una experiencia especialmente dura, ya que no quiso descubrir en ningún momento que su madre había sido ingresada: «Mi hija Anna lo ha pasado muy mal, se hacía la fuerte como una mujercita. En el fondo estaba muy angustiada»
La conductora de ‘Sálvame’ también ha confesado que vivió estos momentos con mucho miedo, pero que tras el enorme susto todo parecía volver a la normalidad: «Estoy bien, prácticamente recuperada, ya tengo anticuerpos, la prueba de antígenos ha dado ya negativo, a volver a la guerra... Yo soy deportista, no tengo ninguna patología y tengo 51 años. Nunca pensé que iba a pasar por esto, ahora toca recordarlo como algo que ya pasó».
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