entrevista
«¿El crimen perfecto? La muerte por sofocamiento no deja signos específicos y los tóxicos volátiles también pueden camuflarse»
Joaquín Lucena, jefe de Patología Forense del Instituto de Medicina Legal de Sevilla desde 2004, que descubrió entre otros casos el enigma de la muerte de tres miembros de una familia en Alcalá de Guadaira a causa de unos tapones industriales