La primera fábrica de Fiat se reconvierte en el jardín colgante más grande de Europa

En la década de los años 20 inició su andadura la primera fábrica moderna de FIAT, un edificio inmenso de cinco plantas que claramente se inspiraba en la factoría levantada por Henry Ford en Detroit y que, como colofón, albergaba en su azotea una pista oval para testar 'in situ' los modelos que salían de la cadena de montaje. El Edificio Lingotto -nombre que tomó gracias a su parecido desde las alturas con un lingote de metal y que sirvió para bautizar también el propio barrio de Turín en el que está ubicado- se mantuvo a pleno rendimiento hasta los 70, cuando la compañía traspasó todo el protagonismo de su producción a la planta contigua de Mirafiori.

Poco después, el Lingotto pasó a ser un espacio urbano enfocado al ocio hasta el punto de integrar en la actualidad un centro comercial y hasta un hotel de cuatro estrellas (NH Torino Lingotto Congress.) Sin embargo, el paso de los años no le ha hecho perder ni un ápice de la magia y la importancia que suponen sus muros para la historia del automóvil. De hecho, para colmarlo de más vida que nunca, el grupo Stellantis ha convertido el famoso circuito en una terraza llena de flora que abre sus puertas al público con el objetivo de crear un nuevo punto de encuentro en la ciudad para jóvenes, familias y todo aquel que desee respirar el incomparable aroma que allí se destila.

La inauguración de la mencionada Pista 500 ha contado con la presencia del mandamás de Stellantis, John Elkann; de su hermana y también descendiente directa de los Agnelli, Ginevra Elkann; del CEO de FIAT, Olivier François; y del músico y vocalista de U2, Bono, quien además ha presentado una nueva edición especial para los 500e, 500 L y 500X . Se trata de la versión (Red), una edición en la que el color rojo es protagonista tanto en el exterior como en el interior y que nace de la filantropía llevada a cabo por el cantante irlandés a través de su asociación (Red).

Junto al estreno de la Pista 500 también debuta un nuevo museo dedicado al emblemático FIAT 500 que repasa en la que fue durante tanto tiempo su cuna todas y cada una de las generaciones que han ido viendo la luz. Esta Casa 500 se encuentra en los pisos inferiores de la Pinacoteca Agnelli, donde por cierto los visitantes pueden apreciar desde 'picassos' hasta 'renoirs', 'canalettos', etc.