Jordana Brewster: «Paul Walker era un hombre lleno de vida»
La actriz regresa al frente de «A todo gas 7» con el sabor amargo de la desaparición de su compañero de reparto
Junto a Paul Walker , Jordana Brewster desarrolló una historia de amor en la ficción que cautivó a sus seguidores, aunque en la realidad ella está felizmente casada con el productor Andrew Form . Hija de una modelo brasileña y un banquero norteamericano, la actriz siempre supo que su futuro era la interpretación. Para ella la suerte se presentó en un casting en Nueva York hace dieciséis años cuando consiguió el papel de Mía Toretto. Y es que, como ella misma reconoce, «A todo gas» le cambió la vida.
-Si para nosotros es muy triste volver a entrevistar al equipo de «A todo gas» sin Paul Walker, no puedo imaginar lo que debió ser para vosotros trabajar sin él
-Sí, es cierto. ¿Te acuerdas de las primeras entrevistas en Universal? Como tú, estoy deseando salir de aquí. En un mismo día tengo momentos malos y otros regulares, pero siempre le recuerdo. Es muy raro no tenerle a mi alrededor porque aún no me hago a la idea. Durante el rodaje su recuerdo latía en cada uno de nosotros, fue durísimo. Cada vez que iba al rodaje, o ahora con la promoción, sentía que iba a verle en cualquier momento. Todavía, un año después, no consigo entender que se ha ido. Era un hombre lleno de vida, siempre feliz, cariñoso, el hecho de que no este aquí simplemente no tiene sentido.
-Su marcha ha hecho que el resto del equipo se uniera más.
-Sí, sin duda. Tenemos la suerte de ser como una familia y eso nos ha ayudado a procesarlo. Que James Wan estuviera tras las cámaras nos amparaba mucho, porque cada vez que alguno necesitaba un momento para llorar o desahogar su pena se mostraba paciente y nos dejaba.
-Sin revelar lo que ocurre en el filme. ¿Cuándo es él y cuándo no?
-No podemos hablar sobre esas imágenes.
-¿Qué significa esta saga en su carrera profesional?
-Yo le debo mi carrera a esta franquicia. Cuando rodé la primera película estaba todavía en el colegio universitario y me tomé un verano para trabajar. El éxito fue enorme y pensé que podía seguir estudiando. Tras siete años vinieron a buscarme para rodar la cuarta y yo no podía creerlo porque entonces nadie me daba trabajo. Fue excitante regresar a una franquicia que poco a poco se ha ido haciendo más grande. Ha sido una bendición.
-¿Por qué cree que tiene tanto éxito esta saga?
-Sinceramente, creo que gran parte del éxito es suerte. Siempre hemos representado un grupo multicultural y el público se ve reflejado. Aunque la franquicia continúa creciendo, nunca nos hemos alejado del corazón que mostramos al principio. Es el sentimiento de lealtad, su código de conducta, lo que hace que la gente se identifique con este grupo. No importa lo que hagan, ya sea ilegal o inmoral o en increíbles circunstancias, la audiencia está con ellos porque siempre se ponen primero ante sus amigos. Dan la vida por sus compañeros y esa idea fascina a los admiradores.
-Su maternidad va de la mano con la de su personaje en Furious 7. ¿Existe un paralelismo entre usted y Mía?
-Sí. Ahora como madre puedo identificarme con el personaje en las escenas en que ve a su hijo en peligro.
-¿Es «A todo gas 7» el final de su participación en la franquicia?
-No lo sé, no lo sé. No depende de mí y espero que no sea el final. Me fascina la saga y adoro formar parte de esta familia. Ojalá puedan incluirme de alguna manera, aunque entiendo que será difícil.
-¿Siguen reuniéndose Michelle, Vin y usted en privado?
-Sí, sí. Solemos reunirnos en cumpleaños y fiestas. La amistad es una de las grandes ventajas de formar parte de este elenco.
