Los seguidores de «Juego de Tronos» temen que la serie destroce tramas de la novela antes de publicarse

Una nueva amenaza de «spoiler» está trayendo de cabeza a los seguidores de la saga de George R.R. Martin , pues la nueva temporada de la serie « Juego de tronos », producida por HBO , puede traer consigo filtraciones de lo que sucede en cada capítulo de la novela. Por esta razón, muchos lectores están eludiendo de forma premeditada cualquier información referida a su serie favorita, que pueda contener datos sobre la trama, desde fotos a trailers, pasando por los tuits o todo aquello que vaya encabezado del titular «Juego de Tronos».

Esta terror es algo de lo que estaban exentos los que tienen la suerte de haber acabado ya los cinco libros publicados hasta ahora. Pero esa tranquilidad puede que haya llegado a su fin, después de que haya anunciado que los destinos de los personajes son diferentes entre la serie y el libro, y que podemos encontrar muertes en la televisión que no se producían en las páginas de la novela.

Esto abre un horizonte totalmente nuevo, porque el lector de los libros no puede estar seguro de que lo que leyó sobre un personaje en concreto vaya a cumplirse en la producción de HBO. En este sentido, se ha filtrado que un actor de la serie se sorprendió al ver que su personaje fallecía, a pesar de que en los libros seguía vivo.

Pero esto abre el horizonte de un «spoiler» de dimensiones desconocidas, puesto que los seguidores aún no saben si Martin tiene planeado un final más o menos común para las dos historias. Si no fuera así, como ha anunciado, es probable que ambas tramas pierdan entidad. Pero los seguidores temen que si las tramas son iguales o parecidas y vemos morirse a uno de los personaje en la serie, puede significar que, de alguna manera, su evolución en los libros no tendría ya ninguna importancia para la gran resolución final y su presencia es de todo menos fundamental.

Esta circunstacia pone en peligro la multitud de frentes abiertos que están trazados en la novela, puesto que si la propia serie cierra puertas que los libros aún no ha hecho, a los lectores se les quita la posibilidad de ver desarrollos que antes de empezar ya sabemos que están muertos.

La única solución de este problema es que la evolución de la serie y las novelas sea lo suficientemente distinta como para que no le afecten estos movimientos.