«Bajo sospecha», un drama policial sin disparos

La desaparición de una niña, un extraño ambiente, dos agentes infiltrados y muchos sospechosos, son los mimbres que sustentan la trama de «Bajo sospecha», la serie producida por Bambú y que llega hoy martes, a las 22:30 horas, a la parrilla de Antena 3 . Se trata de un drama policíaco protagonizado por Yon González, Blanca Romero y Lluís Homar, junto a Pedro Alonso, Alicia Borrachero y Armando del Río.

Ramón Campos, creador de la serie junto con Gema R. Neira, asegura que trabajar en esta serie «ha sido todo un orgullo y un nuevo reto para nosotros, algo que nos gusta y que nos permite avanzar» -y añade- «nos remite a un género («Desaparecida») en el que comenzamos hace ocho años». Para Teresa Fernández Valdés, productora ejecutiva de «Bajo sospecha», «esta historia no está inspirada en ningún caso conocido y se va a poder ver de principio a fin a lo largo de ocho episodios. Una vez resuelto este, los policías protagonistas se adentrarán en otras historias en las que se verán casos de todo tipo».

Esta ficción está dirigida por por Silvia Quer y Jorge Sánchez Cabezudo. En palabras de Sonia Martínez, directora de ficción de Atresmedia «estamos ante una serie que tiene muchos elementos que enganchan desde el primer instante. Se trata de una historia policíaca en la que a diferencia de otras no hay ni persecuciones ni disparos, está tratado más desde el punto de vista psicológico».

«Bajo sospecha», narra la investigación de los dos policías asignados al caso -Víctor (Yon González) y Laura (Blanca Romero)- que trabajan de incógnito, y su superior, el comisario Casas (Lluís Homar). Los dos jóvenes agentes no se conocían de antes de ser enviados al pueblo. Son el día y la noche. Laura es firme, ordenada y siempre se ciñe a las normas. La actriz asegura que «en los primeros episodios estoy convencida que va a caer mal a la audiencia... después cambiara». Por otra parte, Yon González comenta que Víctor, su personaje «es impulsivo, caradura, y está dispuesto a lo que sea por descubrir la verdad». Dos personalidades opuestas condenadas a entenderse y hacerse pasar por un matrimonio muy enamorado.

Para Lluís Homar la fortaleza de esta serie «está en la suma de los actores que en ella intervienen y las historias que en ella se cuentan. Todos son sospechosos y el espectador va a ser testigo de todos los giros argumentales. La identidad del culpable solamente la conocían los directores y guionistas, yo sinceramente iba muy despistado y eso es un gran mérito de esta serie»... y es que para dar mayor tensión y emoción durante el rodaje de «Bajo sospecha» los actores desconocían quién era el culpable «no nos enteramos hasta el último episodio e incluso entre nosotros hicimos una porra para ver quién lo acertaba», asegura Blanca Romero.

Todo comienza cuando la familia Vega se prepara para celebrar la Comunión de los dos pequeños mellizos: Alicia y Pablo. La ceremonia se celebra en el restaurante familiar al que han acudido abuelos, tíos y primos. La jornada transcurre con normalidad, hasta el momento en que deciden hacerse una fotografía que recuerde este día. Es entonces cuando se percatan de la desaparición de una niña...