Christian Bale explica el final de «El caballero oscuro: La leyenda renace»
¿Ocurrió realmente lo que muestra la última escena o era un sueño con el que nos engañó Christopher Nolan?
[Aviso: esta noticia contiene spoilers, detalles sobre la trama de «El caballero oscuro: la leyenda renace»]
El final de « El caballero oscuro: La leyenda renace », la película que cerró la trilogía sobre Batman a cargo de Christopher Nolan , «no fue un sueño» ni un engaño a los espectadores. Al contrario: lo que se mostraba era muy real. Palabra del protagonista del filme, Christian Bale , quien no tuvo inconveniente en analizar esa última secuencia en una entrevista con Entertainment Weekly .
[ Los celos de Bale por el Batman de Affleck ]
Para situar al lector, la secuencia es la siguiente. Alfred ( Michael Caine ) se detiene en una terraza de una cafetería de Florencia. Tras pagar su consumición, su vista se posa sobre una pareja. Ella, de espaldas, no es otra que Selina Kyle, alias Catwoman ( Anne Hathaway ); y él, de frente, es el mismísimo Bruce Wayne, el millonario que acaba de dejar en herencia su Batcueva y sus compromisos como héroe a Robin. Alfred y Bruce se saludan sutilmente y el antiguo mayordomo se va...

Sin embargo, en contra de una escena aparentemente inocente juegan dos factores. El primero, que el espectador acaba de asistir a la supuesta muerte de Batman/Wayne cuando el Caballero Oscuro se sacrifica para alejar una bomba atómica de Gotham. El segundo, que previamente Alfred había descrito una escena similar (un Bruce feliz y despreocupado, con su familia) intentado convencer a su querido patrón de que colgara el traje de una vez.
[TOP: Christian Bale, el mago de la báscula ]
Nada de todo esto influye en la opinión de Bale, que se muestra tajante. «Mi opinión personal es que no, no fue un sueño, que fue algo real». Tan breve como conciso y concluyente. Aunque es difícil que ponga fin a las teorías que circulan sobre las auténticas intenciones de Nolan.
Razones no les faltan a los más escépticos, teniendo en cuenta los ambiguos finales de otros trabajos del británico, como « Memento » y « Origen ».
Noticias relacionadas