Sam Claflin («Sinsajo»): «Jennifer Lawrence pone el listón muy alto a sus compañeros»
El actor inglés, que interpreta a Finnick en «Los juegos del hambre», iba para futbolista hasta que sufrió una lesión de adolescente
El actor inglés Sam Claflin (Ipswich, Suffolk, 1986) pudo haber sido futbolista. Su problema no fue la falta de talento, sino una lesión de tobillo. Con solo 16 años se truncó su sueño de jugar en la Premier League. Una década después, enrolado en la saga «Los juegos del hambre», que el pasado viernes estrenó su tercera entrega, « Sinsajo parte 1 », no se arrepiente lo más mínimo. «Como futbolista, tu carrera se acaba con 35 años. Como actor, realmente no acaba nunca», explica durante la entrevista que concede a HoyCinema durante su paso por Madrid.
[ Crítica de «Sinsajo parte 1» de J. M. Cuéllar]
De dar patadas a un balón a manejar un tridente en una de las franquicias con más tirón entre el público juvenil. E igual de «afortunado» (palabra que no se cansa de repetir) que como se sentía cuando disfrutaba en un campo de hierba. «El fútbol era mi sueño, sí, pero creo que todos los niños tienen 500 sueños diferentes. Pronto me di cuenta de que no era lo suficientemente bueno para competir, de que no sería para siempre».
El cine , en cambio, parece dársele bastante bien. Empezó de cero («mi familia no podría estar más lejos de este mundo: mi madre trabaja en un colegio y mi padre es asesor financiero; yo rompí el molde») pero una especie de ángel le ha ido guiando desde que debutó a lo grande en el cine, en « Piratas del Caribe. En mareas misteriosas ». «Era como un conejo frente a unas luces, estaba muy confundido», recuerda de aquellos días iniciales, no tan lejos (hablamos de 2011).
En « Los juegos del hambre » se codea con una actriz aún más joven que él, pero que ya sabe lo que es ganar un Oscar y optar a otras dos estatuillas: Jennifer Lawrence . Por lo que cuenta, no le ha pedido la receta de su éxito. «No necesita darme ningún consejo, solo tienes que mirarla para darte cuenta de cómo lo maneja. Es una de las más trabajadoras pero también le encanta divertirse. Merece lo que tiene, pone el listón muy alto y es un desafío para todos», se explaya en sus elogios.
[TOP: el meteórico ascenso de Jennifer Lawrence ]
No faltan actores veteranos y de reconocido prestigio en la saga en los que puede mirarse alguien que empieza como Claflin, como el difunto Philip Seymour Hoffman : «Sigue siendo un gran héroe para mí y siempre lo será. No solo era un actor increíble, sino también una persona increíble. Trabajar con él fue un privilegio y un honor. Fue una pérdida triste para la actuación».
Como Marilyn Monroe
De la nueva entrega de la saga, Claflin apunta varios alicientes. «Ya no hay juegos del hambre, esto es la vida real, y esto hace la película muy interesante. Ya no son las vidas de 24 personas, sino de toda la población». De su personaje, Finnick Odair, explica que esta vez el rol es menos físico («ha pasado por experiencias muy traumáticas, que le han hecho mucho daño, está en un lugar muy oscuro»). Y se arranca con una atrevida comparación: «Te das cuenta de que en la película anterior era solo un personaje que interpretaba. Como Marilyn Monroe , que fuera de las cámaras era un ser humano inseguro».
Lo que es seguro es que Claflin se va haciendo un nombre en la meca del cine, con «Los juegos del hambre» como trampolín para futuros proyectos. El actor parece tomárselo con calma. «Para mí Hollywood es como un destino de vacaciones. Es extraño, no me siento parte aún de Hollywood, intento verlo como trabajo en lugar de un segundo hogar. Mi casa está en Londres». Y, de nuevo, insiste en definirse como «muy afortunado». «Creo que solo un 4 por ciento de los actores trabajan, es una estadística ridícula, una industria en la que es muy difícil entrar», recuerda.
Noticias relacionadas