ALIMENTACIÓN SOSTENIBLE
Aromas artesanos de tradición y sostenibilidad
La Mexicana ofrece café tostado artesanalmente en envases 100% reciclables para frenar el deterioro de la naturaleza
Entrar en el número 24 de la madrileña calle Preciados es sumergirse en la historia deleitados por el aroma único del café . La Mexicana , que este año celebra su 130 aniversario , es un ejemplo de esas empresas centenarias capaces no solo de sobrevivir al tiempo, sino de adaptarse a él y mirar hacia el futuro. Cada día, grano a grano, se ha sumado al reto sostenible y hoy, la tercera generación de este negocio familiar mantiene el firme propósito heredado de su abuelo de tostar y vender el mejor café , pero desde una perspectiva honesta y responsable con el medio ambient e.
«Realizar cambios sostenibles en una empresa centenaria es un reto que afrontar y transmitir a nuestros clientes», explica su directora general, Iria Rodríguez, firme defensora de la sostenibilidad y el medio ambiente, y con quien el concepto de reciclaje , respeto y solidaridad se han sumado a los pilares sobre los que se asienta una marca que rejuvenece sin perder su esencia artesana, apostando siempre por la especialización, experiencia y calidad.
Y a la hora de poner su granito de «café» para contribuir a frenar el impacto medioambiental son variadas las acciones que se están llevando a cabo, como el cambio de packaging . Innovación y esfuerzo para lograr paquetes de café 100% reciclables que, además, permiten mantener aún más fresco el producto. Desde que se embarcaran en la aventura del ecommerce reducir su huella ambiental ha sido una de sus mayores preocupaciones y para ello ha eliminado todo el plástico de los envíos on line y apostado por otras soluciones, como cajas de cartón impresas solo con una tinta, tintas al agua , material de relleno con papel reciclado o cierres con cinta engomada ecológica .
Su preocupación por ofrecer el mejor café y los mejores productos les ha llevado a poner en el mercado un nuevo café ecológico soluble liofilizado que proviene de fincas cafetaleras ecológicas, gracias a lo cual puede lucir en su envase la eurohoja, el sello ecológico de la Unión Europea. Además, en Cafés La Mexicana tras una exigente compra a proveedores de confianza, los granos de café verde son introducidos en sacos que son elegidos por cada finca y que cuentan con diseños muy diferentes dependiendo del lugar de origen. Desde tierras lejanas inician una larga trayectoria hasta llegar a las manos del maestro tostador. Él será el encargado realizar el tueste de manera artesanal, que sigue siendo identidad de la casa. «Cada uno de los sacos que traen hasta nosotros el café tiene una historia intensa, un largo camino que no queremos que acabe en nuestra fábrica. Por ello hemos querido darles una segunda vida en la que puedan marcar tendencia y cuidar el medio ambiente», explica Iria Rodríguez. Para ello, y gracias a dos emprendedoras españolas, que los lavan y cosen con delicadeza y esmero, son convertidos en originales bolsos . Piezas únicas con las que La Mexicana quiere representar valores como el reciclaje, la reutilización, el respeto a la naturaleza y el apoyo al pequeño comercio.