Estos son los consejos de la DGT para los conductores que usan gafas o lentillas

Durante la conducción hay factores muy diferentes que debemos tener en cuenta : las circunstancias meteorológicas, las de la vía, las del propio tráfico en el momento en cuestión, las de nuestro vehículo y las propias del conductor. Todas ellas podrían desencadenar un accidente, por lo que lo más conveniente es prestar toda la atención posible y extremar la precaución.

En esta ocasión la Dirección General de Tráfico (DGT) ha emitido un aviso destinado a los conductores que llevan gafas o lentillas en el coche . De hecho, se trata de una serie de consejos y recomendaciones para estas personas cuando se pongan al volante.

En primer lugar, lo recomendable es que si los usuarios usan alguno de estos elementos los lleven puestos durante todo el trayecto para garantizar una visión óptima de la vía y las circunstancias del tráfico. Asimismo, para quienes usen lentes de cerca se aconseja el empleo de gafas progresivas de forma que puedan ver correctamente la información del panel de instrumentos del automóvil.

Las gafas de sol ayudan a mitigar posibles deslumbramientos por el sol durante las horas diurnas, por lo que su uso es recomendable para todos los conductores. Quienes tengan algún defecto en la vista pueden llevar sus propias lentes de sol graduadas en el vehículo. En el aspecto contrario, el organismo dirigido por Pere Navarro recomienda dejar de conducir en la medida posible por la noche o cuando haya mal tiempo si estas circunstancias dificultan la visión de la carretera.

Con el objetivo de evitar el efecto túnel (el estrechamiento natural de la visión hacia el centro de la vía debido a la alta velocidad) se recomienda que, si se tiene algún tipo de problema visual, se reduzca un poco la velocidad.

Por último, se hace hincapié en las visitas al oftalmólogo . Si durante alguna consulta o revisión es necesario dilatar las pupilas, se aconseja no volver a conducir hasta que el efecto haya desaparecido, igual que si se tomara algún fármaco o producto que afecte a la vista, siguiendo en todo momento las indicaciones del médico.

Por otro lado, la DGT recuerda que ir al volante con ciertas enfermedades que afecten a la conducción puede acarrear multas de hasta 6.000 euros.