Tomamos las reviradas carreteras de la costa cántabra y asturiana con el Porsche Cayenne
Los sistemas de control del Cayenne turbo se agradecen a la hora de domar los 550 CV de potencia en las reviradas carreteras que bordean la costa cántabra y asturiana
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Las constantes lluvias de primavera han teñido de un verde intenso los paisajes del norte. El recorrido desde Santander a Gijón por la autovía del cantábrico es un paseo por la más amplia paleta de esta tonalidad sentado en un asiento privilegiado de uno de los coches más espectaculares del mercado, el Porsche Cayenne Turbo. Prácticamente un salón con ruedas que convierte el viaje en un placer.
Afrontamos los 186 kilómetros distancia combinado tramos por autovía con otros por carreteras regionales pegados a la costa. El comportamiento del Cayenne Turbo es impecable en todo tipo de vías, a lo que ayuda el motor de 4.0 litros V8 biturbo de 550 CV y 770 Nm (20 Nm más que la versión anterior). Un motor que da respuesta a cualquier necesidad, ya sea un adelantamiento o los trazados revirados de carreteras de montaña, momentos en los que se agradecen los ocho cilindros, que permiten una aceleración de 0 a 100 km/h en 4,1 segundos y alcanzar una velocidad máxima de 286 km/h, con un consumo medio homologado de entre 11,7 y 11,9 litros a los cien kilómetros (aunque durante la prueba se nos disparó hasta los 12,5 litros a pesar de llevar una conducción contenida).
En el camino desde Santander abandonamos la autovía pasada Torrelavega para visitar Santillana del Mar, Cóbreces, Comillas y San Vicente de la Barquera. En esta parte del trazado, se agradecen los sistemas de control del Cayenne Turbo que permiten domar los 550 CV de potencia. Ayudas como la suspensión neumática, con amortiguadores adaptativos (PASM) de dureza variable. El modelo cuenta con un sistema anti balanceo, además de eje trasero direccional y frenos carbocerámicos . Por dentro, muestra un diseño ergonómico en el que todo está al alcance de la mano. El efecto de estar como en casa mientras conduces, se incrementa gracias al sistema de Bose Surround de 710 vatios, los asientos deportivos con 18 ajustes o el techo panorámico.
Tras surcar las carreteras reviradas, de la costa cántabra, tras superar San Vicente de la Barquera, regresamos de nuevo a la autovía del cantábrico a la altura de Unquera y enfilar hacia Gijón de forma directa, dejando a nuestra derecha Llanes, Ribadesella o Villaviciosa.
La entrada en Gijón es preciosa, a través de los jardines que abrazan al nuevo estadio del Molinón, preludio de la impresionante playa de San Lorenzo, con sus 1.550 metros y forma de concha. Nada más llegar a Gijón es recomendable aparcar el coche y disfrutar de esta villa marinera. Tomamos como centro de operaciones el Hotel Asturias, protagonista en «Volver a empezar», la película con la que José Luis Garci ganó el Oscar y que está en la plaza Mayor. Desde aquí se llega andando prácticamente a todas partes, pero es recomendable el casco antiguo llenos de bares o el antiguo barrio de pescadores en Cimadevilla.
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