Recorremos las costas más salvajes y auténticas con el Mitsubishi Eclipse Cross
Con el «todocamino compacto», que aúna calidad y dinámica de conducción, recorremos emplazamientos únicos de la provincia de Cádiz
El verano está para moverse . Y que mejor que alejarse del mundanal ruido de la capital e irse a uno de los emplazamientos costeros con más encanto de nuestro país . La provincia de Cádiz tiene un aspecto especial, una «isla» de la que puedes entrar y salir por carretera y en la que puedes disfrutar del sol y la playa en una de las costas más salvajes y auténticas de España. Si a eso le sumamos la gran riqueza gastronómica, estamos ante un destino que hay que hacer todo lo posible por conocer. Porque para disfrutar de un viaje no hay que irse a la otra punta del mundo.
Y no se nos ocurre mejor compañero para tocar sus costas que el Eclipse Cross , el nuevo modelo de Mitsubishi , ya disponible en el mercado con una motorización de lujo: un 1.5 turboalimentado de 163 CV denominado 150T. Se trata de un vehículo con mucho carácter, sobre todo, gracias a su tracción 4x4, la cual permite superar cualquier terreno sin asfaltar con soltura. Una característica completamente necesaria en la actualidad para que un vehículo ofrezca la estabilidad, ergonomía y seguridad necesarias para largas rutas por carretera.
Pero también se busca amplitud y consumo . Aunque de esto no carece nuestro compañero de viaje. El Eclipse Cross se mueve en unos contenidos 6,6 litros cada 100 kilómetros y propone a sus ocupantes un entorno amplio y espacioso con un salpicadero a baja altura y de unos asientos traseros ajustables.
De la capital al interior
Desde luego, un «todocamino compacto», de elevada calidad y buena dinámica de conducción, perfecto para recorrer los emplazamientos de la provincia de Cádiz, desde su capital hasta su interior, desde Jerez de la Frontera, con las increíbles puertas de sol de Zahara de los Atunes a Algeciras rodeando el peñón más famoso de la península. En esta ocasión, nuestras ruedas realizaron un recorrido desde Sanlúcar de Barrameda a Tarifa, sin dejar de realizar varias paradas muy especiales en nuestro camino.
La primera parada obligatoria -teniendo que dejar a un lado el coche- es en el Parque nacional y natural de Doñana, casi tocando la provincia de Huelva, al margen izquierdo del estuario que forma el río Guadalquivir y desde donde grandes expedicionarios de la talla de Cristobal Colón , Magallanes o Juan Sebastián partieron en sus aventuras.
Bodegas, multitud de oferta cultural y, especialmente, gastronómica, conforman nuestra siguiente parada. El Puerto de Santa María es un enclave de lujo donde poder degustar ese «pescaito frito» sentado en una terraza bajo el buen clima que ofrece la provincia de Cádiz. Eso sí, no te olvides de recorrer todas las plazas, jardines, iglesias y lugares destacados se encuentran dentro de la ciudad. Aunque si lo tuyo son los pueblos con encanto y el atractivo de alguna de las mejores playas de Europa, Conil de la Frontera es tu lugar, una de los parajes más pintorescos de toda la Costa de la Luz.
Si bien la ruta planteada nos dejará otros tantos lugares donde poder hacer un alto en el camino como la Playa de Bolonia y sus hermosas dunas infinitas, el final del itinerario nos lleva dentro de la ciudad amurallada de Tarifa, el punto más meridional de Europa , el más cercano al continente africano y el conocido por todos como la capital del surf que presume de poseer restos prehistóricos, vestigios fenicios y, por supuesto, romanos.
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